Final.

26.3K 2.7K 1.8K
                                    

Habían pasado ya un año, había estado saliendo con Diego, algunas citas fueron arruinadas por mi pero él sabía como solucionar las cosas.

Nunca me hubiera imaginado gustarle a un chico como él o tener citas con un chico así.

Pero la vida siempre es una sorpresa, nunca se sabe lo que puede pasar.

El sonido de mi teléfono me sacó de mis pensamientos, estaba escribiendo en mi cuaderno, lo cerré y tomé mi celular, era un mensaje de Diego.

«Dragón: Mira por tú ventana.»

Me acerque y no había nada, saque la cabeza pero no encontré nada inusual.

«Unicornio: Diego no hay nada.

Dragón: Jajaja no pensé que fueras a creerme.

Unicornio: Idiota...

Dragón: Okay, ahora si acércate a tú ventana.»

Me acerque y tampoco había nada, suspire molesta ¿por que le volví a creer?

«Unicornio: No hay nada, tonto.

Dragón: Pero más tonta tú por volver a creerme ;)

Unicornio: Voy a bloquearte :)

Dragón: No te creas amor, me hackearon <3

Unicornio: En serio, te estas ganando que te bloquee.

Dragón: Ahora si, mira por tú ventana.»

Apague mi celular, era un tonto, aunque tenía razón, yo era más tonta por creerle.

Mi hermana entró a mi cuarto y me enseñó su teléfono, tenía un mensaje de Diego.

«Best Friend <3: ¡Hey! Dile a mi unicornio que mire por su ventana.»

—Mira a la ventana, por favor–dijo mi hermana con una sonrisa.

Mire por la ventana y ahí estaba Diego vestido de príncipe sobre un caballo al cual le pegó un cono blanco, abrí la ventana, saque la cabeza.

—¿Que haces montado en esa cosa?–le pregunte sorprendida.

—Vine a preguntarte si quieres ser mi novia.

—¿Y no me lo podías preguntar como una persona normal?

—No.

—¿De donde sacaste el caballo?

—Tengo conocidos, me deben favores.

—En verdad estas loco.

—Si, pero por ti.

—Eres muy cursi–dijo mi hermana mientras se acercaba a ver.

—Lo siento, viene incluido con el caballo–mencionó Diego mientras reía.

—Ya dile que si–me dijo mi hermana emocionada.

—¡Mi padre va a matarte!–le advertí nerviosa.

—Le pedí permiso antes, no iba a arriesgar mi bello rostro.

—¿Cuando?

—Hace una semana, tú madre también aceptó.

—¿Sabes usar esa cosa?

—Si, mira hasta le pegue un cuernito, es un unicornio, planeaba conseguir un dragón pero ya no estaban disponibles–dijo riendo.

Me parecía que Diego era muy adorable, para pedirme algo tan sencillo se había tomado la molestia de hacer algo especial.

—Te daré el honor de ser mi novio–dije con una sonrisa.

—Se supone que yo debería decir eso, ahora baja, te llevare a pasear en tu unicornio.

—Claro, allá voy.

Estaba emocionada, no había subido a un caballo antes, baje a la sala, me despedí de mis padres, al salir al jardín Diego estaba esperando frente a la puerta.

—Oye en realidad no se usar un caballo, lo dije para no quedar como un idiota frente a tu familia.

Empecé a reír, él solo me vio apenado, lo tomé de la mano.

—Bien pues caminemos, es más saludable.

—Supongo que si, pero esa cosa deberá acompañarnos–me susurro.

—¿Lo trajiste caminando?

—Si, me subí en él hasta que llegué aquí.

—Bien, vamos por un helado ¿a tú amigo le gustaran?

—Creo que si–dijo mientras reía.

—¿De donde lo sacaste?

—Mi tío tiene una granja y su hijo me debía un favor.

—Te agradezco haber hecho esto, fue muy lindo de tu parte.

—Lo sé, todo lo que yo hago es grandioso.

—Baboso.

—Te prometo aprender a usar esa cosa para poder llevarte a pasear.

—Estaré esperando–reí.

Era grandioso que Diego hiciera esto por mi, era tan dulce que esperaba estar a su lado por un largo tiempo.

⚫Fin⚫

¿Cómo hago que me notes? [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora