- Muy en serio, me haría muy feliz que concieras a mis padres.
Gabriel: Si así lo quieres mi reina, iremos.
- ¡Si, nos vamos a Los Ángeles! - me planta un beso en la frente.
De verdad creí que no aceptaría, esto me hace muy feliz.
Dos semanas despúes...
Ya estamos en el avión rumbo a Los Ángeles, vamos a estar allí todo el fin de semana. Estoy feliz y emocionada, ya quiero llegar a casa, ver a mis padres, llevar con Gabriel a mis lugares favoritos, al cartel de Hollywood. No puedo esperar a ver la cara de mis padres cuando se enteren que conseguí un novio y que aparte es fabuloso. Gabriel va dormido, se ve muy sexy aún dormido. Son casi 6h de vuelo creo que yo también debería intentar dormir un poco. Cierro los ojos e intento quedarme dormida...
...
¡Llegamos! Por fin estamos en Los Ángeles, tomamos un taxi y le doy la dirección de mi casa.
- Ya verás que nos vamos a divertir mucho.
Gabriel: Eso espero. Ya quiero conocer a mis suegros.
- Si, muy pronto. - Sonrió.
El taxi nos deja justo enfrente de la casa de mis padres.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Gabriel: Tu casa es bonita.
- A mi padre le va bien en su trabajo. Vamos.
Tomamos nuestras maletas, abro la puerta y entramos.
- ¿Mamá? ¿Papá?
Mamá: ¿Banana, estás aquí? ¡Mi pequeña!
- ¡Mami! - Corro a abrazarla.
Mamá: ¿Por qué no me dijiste que vendrías? Habría preparado tu comida favorita.
- Quería que fuera una sorpresa. ¿Dónde está papá?
Mamá: En el trabajo. ¿Quién es tu amigo?
- A eso iba... Mamá, quiero presentarte a Gabriel, mi novio.
Mamá: ¡Oh dios mio!
Gabriel: Un placer conocerla, Sra. Wilson.
Mamá: El placer es mío, Gabriel. No puedo creer que mi pequeña banana tenga novio. Crei que, después de lo que pasó con Scott, jamás volverias a tener un novio.
- ¡Mamá!
Mamá: Bueno, sólo digo.
Gabriel: ¿Quién es Scott? - Me susurra.
- Es un ex, nada importante.
Mamá: ¡¿Nada importante?! Cuando terminaron, te encerraste en tu cuarto una semana, recuerdo que tenía que dejarte la comida en una bandeja en el suelo porque ni siquiera me querias abrir la puerta... Eras como el sujeto de Masacre en Texas: Herencia Maldita, ¿sabes de quien hablo, Gabriel?
