¿Me gusta mi Jefe? (Kaisoo - Chenmin)

Epílogo

Tres años después...

JongIn se levantó temprano ese día, con mucho cuidado de no despertar a su lindo esposo salió de la habitación. Preparó el desayuno de Kyungsoo y escribió en un papel algo antes de salir de casa.

Kyungsoo se despertó aquella mañana muy entusiasmado ya que cumplía un aniversario más de casado. Le pareció extraño no encontrar a JongIn en la cama cuando todas las mañanas le abrazaba hasta asfisxiarle susurrándole un: "Buenos días amor".

Se levantó y fue al baño para tomar una ducha, al mirarse en el espejo puedo ver una pequeña nota pegada en una esquina de este.

La tomó y sonrió al leerla.

Buenos días al esposo más hermoso del mundo, hoy es nuestro 3er aniversario de bodas y he decidido celebrarlo de manera diferente. Te sorprenderás al saber lo que se me ha ocurrido.

PD: Te he hecho el desayuno, espero que te guste. 

Kyungsoo se vistió y bajó las escaleras corriendo, quería preguntarle a su esposo que le tenía preaparado. No es que odiara las sorpresas, no, es solo que la espera se volvía irritante y prefería saberlo de antemano.

No había rastros de JongIn en toda la casa. Cuando llegó a la cocina pudo ver su desayuno servido, junto a este había una pequeña nota.

Como dije anteriormente te tengo una sorpresa y sé que quieres saber lo que es, para ello tendrás que jugar un juego. No me verás hasta la noche, en cada nota te dejaré un escrito y la dirección del próximo lugar a visitar, te dejaré algunas pistas. Cómo te imaginas, tendrás que encontrarme. Te deseo suerte.

PD: Deberías visitar la florería del centro, hoy las amapolas se ven más hermosas que nunca.

Kyungsoo devoró su desayuno, tomó su celular y salió corriendo de casa. Cuando llegó a la florería se encontró a Lay, sip, su amigo había comprado un pequeño local en el cual hacían hermosos arreglos florales para cada ocasión.

— Buenos días Lay.

— Buenos días Kyung, ¿qué te trae por aquí esta mañana?

— Bueno, JongIn me dijo que viniera. ¿Él está aquí? —preguntó mirando todo el local.

— No, pero me pidió que te diera esto.

Lay le entregó un hermoso ramo de amapolas a Kyungsoo, entre ellas había una nota.

¿Alguna vez te dije cuánto te amo? si lo olvidé te lo digo ahora, si ya lo dije pues te lo repito: Te amo Do Kyungsoo, eres una hermosa amapola que alegra mis días.