uIX. Día libre.

2.8K 330 64
                                    

Even no parecía recuperarse de esos nervios que llevaba todo el día desde aquella vez luego del evento y la broma que le hicieron.

Habían llevado el caso hasta la policía, luego de hablarlo con los padres del noruego. Desafortunadamente, luego de días de búsqueda, no pudieron dar con el hombre.

Sin intenciones de hacerlo también se dio algo de culpa a los mangakas de aquel día. Dieron disculpas y pagaron una multa al albino. Este, por supuesto, no había aceptado el pago, pero sus padres sí.

Tetsu se enteró que lo de la broma había afectado a su hermano, por lo que estuvo llorando y pidiendo perdón por haber participado en la broma. No se le dijo nada más de lo ocurrido luego de eso para no asustar al pequeño.

Habían decidido en la escuela, luego de enterarse gracias a Mutsumi, darle tres días libres a Even, por lo que esto aprovechó los primeros dos días, junto a el fin de semana, para ver anime hasta el cansancio. El último día, miércoles, que era el que le quedaba libre, literalmente lo patearon fuera de casa, para que saliera al aire libre y se entretuviera fuera.

- ¡Yo no quiero salir! - replicaba el muchacho albino.

- ¡Tienes que salir! ¡Ve a Anime Ito y comprate cosas, compra manga, DVD's, lo que sea, pero tienes que salir! - le ordenó su madre, enredando japonés con noruego.

Even la miró con los ojos entrecerrados, esperando entender las palabras revueltas; hasta que por fin las entendió extendió su mano, exigiendo silenciosamente dinero para hacer todo lo que su madre dijo.

Esta simplemente le lanzó la cartera, repleta de dinero, desde dentro de la casa y después cerró la puerta.

- Bueno...

Y Even se fue directo a Anime Ito.

Extrañamente, no había nada que llamara su atención ese día en la tienda, así que salió y fue a una librería.

Al llegar fue directamente a la sección de manga Yaoi. Algunas chicas lo miraban intrigadas, otras se limitaban a murmurar, y unas cuantas más se acercaban para poder observar "discretamente" lo que el chico comprara.

Tomó cinco mangas yaoi: Mil grullas, Tu fragancia, Bloody Mary, Yoru no Naka de, Kimi wo Sagasu y Hora, mimi ga mieteru yo!. Este último en partes, puesto que ya tenía los primeros volúmenes.

》Ahora a por los shounen.《

Algunas chicas, todavía curiosas por Even, más que nada por su apariencia, lo siguieron hasta los mangas Shounen, la gran mayoría de la Weekly Jump.

Esta vez tomó ocho tomos de mangas: Yakusoku no Neverland, Black Clover [tomo 15, 16 y 17], Boku no hero [dos tomos], uno de los tomos de Boruto y el último tomo de Servamp.

Even iba llenando su pequeña canasta con libros, novelas ligeras y mangas.

Las chicas, sin que él les prestara atención, lo observaban cada tanto. Algunas compraron de lo que él compraba, curiosas. Otras simplemente observaban, y unas más, valientes, se acercaron a hablarle y preguntarle sobre sus lecturas.

- ¿Puedes llevarte todo eso?

- Pero claro.

- ¿Los mangas yaoi son para alguna amiga o hermana?

- Mm... No, son para mí...

- ¡¿Eres un Fudanshi?!

- Eh... sí.

- ¡Genial! Yo soy fujoshi y siempre quise un amigo Fudanshi para hablar de yaoi y shippear personajes... ¡¿Podríamos ser amigos?! ¿Sí, sí, sí...?

[PAUSA] ¡¿El primo de Shinomiya-kun?! - Watashi Ga Motete DousundaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora