[PAUSA] ¡¿El primo de Shinomiya-kun?! - Watashi Ga Motete Dousunda

X. Cambio de imagen.

Pasando los días, cuando todo por fin parecía tranquilizarse dentro de Even, hubo un drástico cambio de imagen en este mismo. Justo un día antes de clases, un domingo por la noche, Even salió junto a sus padres. El lunes en la escuela estaba irreconocible.

— Tú... ¿Quién eres? — le preguntó Kae a Even, pensando en que era conocido pero a la vez dudando. — ¿Te transfirieron aquí?

— Eh... Kae-san, ¿no me recuerdas? Soy Even.

— ¡¡¿QUÉEEE?!! ¡¡IMPOSIBLE!! ¡Even tiene el cabello largo y lacio, no corto y esponjado! Y-y... Y solo eso. ¡Que no!

Even hizo su cubre-boca a un lado, colgando desde su oreja, mostrando una cálida sonrisa tan seductora como su aura de guapura.

— ¡¡Kyaaaaa!! — Kae gritó y abrazó a Even con emoción, pensando que su nuevo look le quedaba estupendo. — Te ves muy bien, Even. Aunque extrañaré tu estilo de Undertaker... ¡kya! ¡Chicos!

Todos se detuvieron a la vez, escaneando con la mirada, de pies a cabeza, al chico apuesto y alto que se encontraba tan cerca de Serinuma Kae. Pronto Shinomiya pudo reconocer a su primo, acercándose a él mientras lo seguía observando. Even alzó los brazos y en silencio exigió un abrazo, cosa que le fue concedida al instante por el castaño.

— ¡¿Even?! — con aquella acción tan cariñosa hacia Shinomiya pudieron deducir quién era el peliplata.

— No lo puedo creer, qué cambio de imagen tan drástico. Y notable. — expresó Igarashi con sorpresa, acercándose a Even y analizando su cabello. — Incluso tu cabello está esponjado en vez de lacio.

— Bueno, mi madre pensó que me haría bien cambiar de imagen un poco. Así también sería difícil que aquellos tipos me reconocieran...

— Oh...

— Entonces tal vez haga que las chicas se interesen por ti todavía más. - opinó Nanashima, pensando que era la oportunidad perfecta de tener menos rivales con lo cuales luchar.

— ¿Eso crees, Nana-san?

— ¿Eh? ¿Ahora me dices "Nana-san"? ¿no era "Nanacchin"?

— Bueno… A veces hay algunos cambios. — Even sonrió hacia Nana, pero esta vez con algo de tristeza.

Kae y Hayato lo notaron, incluso Nana y Mutsumi. Y no pudieron evitar recordar aquel desafortunado suceso que había dejado tan afectado a Even.

— Even, ¿algo más te está molestando? - preguntó Kae, juntando inconscientemente sus manos con las de Even.

— Desde que pasó aquello, ya saben, estaba muy decaído. En mi día libre compré mangas yaoi pero… ya no pude leerlos. Me encontré con Jiyū-san y él se despidió de mí con un beso en la mejilla, y me dio una sensación de asco horrible. Leer las escenas explicitas de los mangas BL hacen que me den ganas de vomitar... Ya no puedo ver ni las portadas…

Kae lo abrazó al escuchar eso. La empatía de su compañera fujoshi estaba sobre las miradas de todos en la cafetería, no le importaba a la pelimorada mostrarse cariñosa con el peliplata.

Los chicos no entendían del todo los sentimientos actuales de Even, así que no se metían. Serinuma lo notó y le susurró a Igarashi que hablaría con ellos después. Cuando Even se sintió mejor, se separó del abrazo de su amiga. Pasó una mano por su rostro y quitó su flequillo, mostrando sin querer su enorme cicatriz. Entonces la nula conversación comenzó con ello.

— Oh, esa es la cicatriz que te hiciste en Noruega, ¿no? - habló Nanashima, carraspeando un poco.

— Porque una vaca te persiguió, ¿verdad? — se burló Hayato, intentando reír aunque no con mucho ánimo.

— ¡La vaca tenía cuernos y corría! ¿Qué querías que hiciera? - exclamó el muchacho peliplata.

El ambiente dejó de ser tan tenso. Se animaron un poco y la conversación fluyó entre bromas y risas hasta que la campana sonó anunciando que las siguientes horas de clases comenzaban.

➤➤➤

— Dijiste que querías hablar con nosotros, Serinuma-senpai. ¿Pasa algo? — habló Hayato, sentándose en la sala del club de historia.

Mutsumi-san ya estaba sentado desde hace media hora, y Nanashima e Igarashi habían encontrado sus asientos al momento. Kae estaba de pie delante de todos ellos.

Continuará…

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Cap pequeño porque sí