➳ Written by GaabyKookie ♡
Un oficial de policía que no entiende la razón por la cual flores de cerezo salen de su boca al toser.
Y un médico cirujano que tiene asumida su filemafobia impidiendo que el amor ingrese a su vida.
☑ Historia JiCheol.
☑ H...
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JiHoon llevaba más de media hora acostado en su cama, sin ser capaz de conciliar el sueño ni de levantarse pero no era porque no podía dejar de ver el edificio donde vivía SeungCheol a través de la ventana de su habitación pensando en lo que había pasado la noche anterior o por la ropa que llevaba la cual se lo recordaba a cada segundo, especialmente por el aroma masculino que desprendía de ella, sino porque se sentía pésimo.
Tenía un insoportable dolor de cabeza, sentía su cuerpo pesado y caliente, especialmente el rostro, pero quería pensar que hubiera sido peor si SeungCheol no hubiese aparecido o si no lo hubiese tomado a la fuerza llevándolo hasta su departamento donde a pesar de todo, pudo abrigarse y descansar.
Sin embargo, había algo, un breve momento que no podía quitar de su mente; la imagen de SeungCheol durmiendo junto a él, abrazándolo y protegiéndolo como si fuese importante en su vida.
Como si sintiese algo por él.
Algo bonito.
Lo cual era imposible.
A no ser que lo detestara tanto como él lo hacía.
Y de ser el caso no lo hubiese abrazado, no le hubiese permitido dormir en su cama, no se hubiese preocupado por él cuando estaba bajo la lluvia.
Frunció el ceño y ocultó el rostro en la almohada al recordar sus largas pestañas y la forma de sus labios.
—Lo detestas —Se dijo a sí mismo —Recuerdas que lo detestas por ser un idiota.
Decidió levantarse a mediodía pero para su mala suerte se sentía peor que antes, afortunadamente tenía dos días libres y sabía que tendría que pedir algunos más porque la gripe que tenía no podría tratarla en ese corto período de tiempo. Se quitó la ropa de SeungCheol y la lavó antes de salir a la calle, tan abrigado como si fuese a la Antártida.
—Hola —Un hombre lo sorprendió en la primera planta del edificio de SeungCheol cuando tímidamente se asomó, todo indicaba que era el dueño —¿En qué puedo ayudarle?
—El oficial Choi SeungCheol... —Musitó sujetando un paquete contra su pecho.
—Él ha salido temprano en la mañana y suele regresar en la noche —Habló el señor —¿Necesita dejarle un recado?
—No, no —Extendió sus brazos ofreciendo el paquete —¿Podría darle esto cuando llegue?
—Sí, claro —El señor asintió con la cabeza y lo recibió.
—Gracias, que tenga un buen día —JiHoon metió las manos en los bolsillos de su abrigo que llegaba hasta sus talones y ayudaba a cubrir la ropa de dormir que llevaba debajo, y se dio la media vuelta volviendo a su hogar.
—Igualmente —Susurró el hombre mirándolo de lejos, asombrado de verlo allí pues lo había visto trabajando en el hospital y no era como los chicos con los que SeungCheol se relacionaba normalmente.
