Sí, señor

15

Chantaje...esto parecía de película.Miré a Dante,estaba tan roto como lo estaba yo,tenia la barba descuidada y bajo sus ojos unas sombras negras delataban lo poco que había dormido.
-Creeme Gin...por favor...-dijo mientras se limpiaba las lágrimas que habían vuelto a aparecer- jamás haría nada que pudiera hacerte daño intencionadamente. Háblame por favor...necesito tu respuesta.
-Te creo,pero no me vale solo con eso,necesito que me expliques todo,pero antes necesito dormir,han sido días muy duros y estoy cansadisima-dije poniéndome en pie dirigiéndome a la que era mi habitación.
-Duerme conmigo Gin...desde que me fui al dichoso viaje no he pegado ojo,y se que pensarás que me lo merezco,y es así,por gilipollas y por no ponerte en preaviso,pero necesito abrazarte y olerte...te juro que no intentaré nada,solo quiero estar contigo.-esto último lo dijo en un susurro.
-Ahora mismo no me apetece mucho que me toques...aún sabiendo que el daño que me has hecho no ha sido intencionado,me has destrozado...pero es cierto que te echo tanto de menos que el pensar en volver a salir por esa puerta se me hace horrible,que te he extrañado tanto que esta conversación parece casi irreal...deberíamos comer algo y recoger todo este desastre,después nos ducharemos y a dormir.
-Mañana hablaremos Gin y te explicaré todo...joder me he comportado como un puto gilipollas y aquí estás tú,volviendo a levantar mi vida simplemente con el hecho de quedarte a mi lado,no te merezco...-dijo mirándome lleno en lágrimas.
No podía verle así,me mataba,al igual que yo sabía que el se estaba odiando por todo el daño que me había hecho,lo podía ver en su cara y en su manera de estar.En dos pasos acorte la distancia que nos separaba y me tiré a sus brazos,el no se lo esperaba y tardó en reaccionar,en cuanto que sus brazos se cerraron a mi alrededor me apreto fuerte,como si tuviera miedo a que desapareciera.Dios...como me hacía falta Dante,no quería que se acabara jamás esta abrazo,lo necesitaba más,necesitaba que me dijera que era yo para él,por que yo quería todo.
-Solo contéstame a una pregunta Dante- dije rompiendo el silencio en el que llevábamos más de diez minutos,y lo sentí asentir contra mi cabeza-¿Ese fin de semana que estuvimos juntos...me hiciste el amor?Por que yo así lo sentí,y no quiero ser más una tonta ilusa.
-Si...pero si te lo hiciera ahora sería muy diferente,antes estaba loco por ti,pero era simplemente atracción física...tu cara,tus pechos,la forma en la que te mojas los labios...labios...-vi como se tapaba la creciente erección que tenia-pero ahora...lo que siento por ti...es puro...nunca lo he sentido jamás por nadie,esta necesidad de ti,de oír tu risa,de tenerte toda para mí,de que estés bien y a salvo en todo momento... nunca me toda mi vida había experimentado esta sensación que hay en mi pecho,no sé como explicarlo...
-Eso es amor Dante.Me pasa exactamente lo mismo contigo.-dije muerta de la vergüenza.
-Tu eres mi amor...