Una chica Maddox

Capitulo 30

(la canción espero que la tomen desde las perspectiva de Daniel, pero si ven que puede encajar con Tara... puede que solo sea casualidad, jaja)

Tan pronto supe la noticia desperté a los chicos, llame a Thomas, empaque unas cosas... la mayoría de color negro, Thiago no insistió en ir pero yo sabia perfectamente que él quería estar ahí pase lo que pase, así que nos fuimos los cuatro. En el camino no solté la mano de Thiago y no dejaba de llorar en silencio, mi mente estaba tan nublada de pensamientos y en esos pensamientos solo estaba aquel pequeño que le faltaba una vida por delante, el viaje transcurrió tan callado que no se en que momento me dormir y como si fuera en un abrir y cerrar de ojos, un beso dulce en mi frente me despertó. Ya habíamos llegado a la casa de mi padre. El ya sabia la noticia así que me recibió con un abrazo esperando a consolarme.

-es mejor que antes de ir se duchen y se cambien - dijo mi papá.

Eso hice, de hecho todos los hicimos, yo me puse la ropa mas cómoda que lleve y peluca de puntas azules y salí de la habitación, como siempre los chicos ya estaban listos esperándome en el auto para ir. Pero el único que estaba en la puerta era Thiago.

-¿quieres y crees que es conveniente que yo vaya contigo? -pregunto Thiago

-si y sí, Thiago - le dije - te necesito allí pase lo que pase, me vale un carajo lo que piense Lucke, tú y yo estábamos juntos, eso es lo que importa - le decía con toda la sinceridad de mi corazón.

-okey, vamos - me tomo de la mano y salimos para ir al auto.

*K*

Tara estaba tan nerviosa que no supo en que momento había llego al hospital, su hermano Travis los había  registrado  con la enfermera que estaba en el recibidor, Daniel se encontraba en el sexto piso, habitación 605 donde estaba todos sus familiares y conocidos. El team Maddox llego al elevador y esperaron a que subiera al piso correspondiere, cuando las puertas se abrieron, los chicos  dejaron salir de primeras a Tara y lo vio. Vio a Lucke, aquel hombre con el que le se habían hecho daño mutuamente, caminaba por el pasillo  que daba desde la habitación de Daniela a la sala de espera, las miradas de aquellos que alguna vez se amaron y ahora eran simple conocidos  se encontraron. Los ojos de los dos habían perdido brillo el uno por el otro,  los dos habían perdido peso, era raro para Lucke ver a Tara con un nuevo estilo pero para Tara era raro ver a Lucke Tan diferente, tan destruido no era el mismo chico que ella había dejado al irse, había cambiado, sus parpados estaban hinchados, sus ojos rojos y las bolsas mas negras debajo de sus ojos. Eso si su porte y su estilo de BadBoy con el que lo conoció Tara seguía intacto pero estaba vez era un BadBoy que se estaba rompiendo por dentro. La distancia que los separaba era corta pero para ellos todo paso en cámara lenta tanto así que parecía que entre ellos habían kilómetros de distancia, los dos acortaron en esa distancia y se fusionaron en un abrazo. Thiago salio a la defensa de Tara, pero Travis le coloco una mano en el pecho.

-es mejor que le des su tiempo - dijo Trenton - ella ya no lo ama es obvio pero entiende por lo que él esta pasando, es mejor que nos sentemos ahí - señalo unas sillas vacías que estaban en la sala de espera - llamare a los gemelos a ver si pueden venir. - se retiro un poco.

El abrazo de aquellos conocidos duro mas de lo que pude durar un abrazo de unos simples conocidos, a pesar de que Tara era mas pequeña físicamente que Lucke él sintió el respaldo y el refugio en esos pequeños brazos. Tanto así que las lagrimas del él empezaron a bajar por sus mejillas y manchar la chaqueta de Tara

-Shhh -le dijo Tara, acariciando su cabeza - todo saldrá bien, calma, shhh - ella trataba de calmar la angustia que sentía Lucke como si fuera un niño chiquito, y Lucke se sentía bien en los brazos de ella pero él mismo ni sabia por que lloraba; si era por su hermano, por su reencuentro, por verla tan diferente, o por si ella ya llevaba compañía. - ¿Qué dijeron los médicos? - se separaron. Y ahí el examino la cara de Tara, empezaba a ponerse paliada, sus mejillas se hundían y su clavícula también