Al día siguiente Mark no pudo asistir a la escuela, en parte era por los golpes y por otra parte estaba el inmenso dolor en su espalda baja, para lo único que se levanto fue para tomar y baño, se sentía asqueroso. Paso toda el día metido en su habitación, viendo películas en netflix para así poder distraerse, ese día no comió nada, ya en la noche se durmió, sintiendo un agujero en el estomago.
En la mañana se despertó un poco tarde, se apresuro a vestirse y desayunar rápido, de lo contrario no alcanzaría a llegar a la escuela antes del cierre de portón, el cuerpo ya no le dolía tanto como el día anterior, después de todo, él ya estaba acostumbrado a ese tipo de dolor, a pesar de que no le gustara. Por suerte Mark alcanzó a llegar ese día a justas horas, casi le cierran el portón y por poco la maestra le cierra la puerta, pero había llegado después de todo, estar ahí en ese curso, en esa escuela, lo hacia feliz y le hacia olvidar los malos momentos, cuando la clase termino, Mark termino de anotar lo que estaba en el pizarron antes de guardar sus cosas, se volteo al sentir que alguien se había sentado en el asiento del frente, su amiga estaba ahí por lo que el cadtañito sonrió.
La chica estaba preocupada por Mark y no tardo en hacérselo saber, el castaño no tuvo más remedio que mentirle, después de todo no podía decirle lo que su padre le había hecho y hacerse pasar por alguien torpe se le daba bien, pasaron todo el receso juntos, conversando de diversas cosas, cuando la campana sonó, Mark vio como los amigos de Claire los miraban, se sintió intimidado por la mirada de la chica castaña de ojos azules, por lo que bajo la vista. En el siguiente receso Claire nuevamente había decidido pasarla con él, Mark no sabia si los amigos de la rubia le tenían mala o no, solo esperaba que no pensaran que les estaba robando a su amiga, él no había querido socializar con ellos ya que se le daba muy mal hablar con muchas personas.
Cuando Claire le dijo que iría al baño, Mark se quedo sentado en aquel lugar, pensaba en que haría cuando su padre decidiera que ya no hacia falta que asistiera a la escuela, le gustaba ese lugar, vio a unos chicos jugar baloncesto, a él le gustaría hacerlo, pero se le daban mal los deportes, Mark pensaba que los chicos tenían un cuerpo increíble y que si él tuviese ese tipo de cuerpo, tal vez podría defenderse de su padre, en eso estaba cuando se dio cuenta que tres de esos chicos se acercaron a él. Se sintió confundido cuando uno de ellos lo llamo marica, a pesar de las cosas que pasaban con su padre, él ni siquiera era gay, lo insultaron un par de veces más, llamando la atención de varios alumnos, lo llamaban gay por haberlos estado mirando, pero él solo los había estado mirando, ¿que tenia de gay eso? trataba de hablar pero su voz temblaba y él comenzaba a tartamudear, después de todo, seguía siendo un cobarde, el cual no se podía defender y le aterraba que lo golpearan. Su amiga llegó en un momento poniéndose en frente de él, enfrentando a los bravucones, ser defendido por una mujer no le molestaba para nada, aunque no sabia que haría si le llegaban a pegar a ella por su culpa, la chica comenzó a burlarse de los idiotas que tenían en frente, cuando vio que el más alto de los chicos empuño su mano para golpear a Claire se paralizo, tenia que hacer algo, pero su cuerpo no reaccionaba, alguien más se metió en la pelea, salvando así a la rubia, Mark se sintió más aliviado y dio un paso al frente para tomar la mano de la chica.
A pesar de que el chico les daba la espalda, Mark lo pudo reconocer, era Ian, el pelinegro les advirtió a los bravucones que no se metieran con Claire ya que ella podría patearles el trasero.
–La semana pasada, ella sola golpeo a cuatro asaltantes – dijo Ian, Mark estaba tan sorprendido como los chicos que lo querían golpear, Claire se veía como alguien frágil y era pequeña, ¿como había podido golpear a cuatro asaltantes ella sola?
Al finalizar las clases, Mark decidió seguir a escondidas a Claire ya que se juntaría con Ian, mientras la comenzaba a seguir se dio cuenta, que los amigos de la rubia lo estaban siguiendo a él, fruncio ligeramente el ceño, al parecer sus planes habían fallado. Ese día decidió volver a casa, tomo el autobús y cuando llego a casa iba a subir directamente a su habitación, pero escucho la horrible voz del amigo de su padre, por lo que se acerco a escuchar de lo que ellos hablaban.
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¡No Te Acerques! #2 Libro
Teen FictionSegundo libro Si quieren entender este libro, pasen a leer el primero, "El Contrato"...