Pacto de Sangre

Capítulo 8.- Pacto de Sangre

Beth

Nos despertamos al amanecer y recogimos el improvisado campamento a todo correr. Cogimos unas manzanas y las devoramos. Miré al horizonte, pensando en cómo conseguir información del padre fugitivo de Anna. Si había escapado de aquella cárcel tendría que haber sido con ayuda del exterior. Amigos fieles.

"Anna, ¿conoces algún amigo de tu padre?"

"A dos, Jonathan y Frost."

"Bien, pues empecemos por el primero. ¿Sabes dónde vive Jonathan?"

Minutos más tarde nos encontrábamos enfrente de una casona enorme. Se encontraba rodeada de otras tantas igual o más lujosas que ella, por lo que intuí que o bien era noble o trabajaba para el Rey.

En recepción preguntamos por él y esperamos en una salita continua a esta. Poco rato después un sirviente nos conducía a su despacho.

Allí, en un gran sillón se encontraba un hombre con aspecto de tener cuarenta años, aunque en su rostro habían marcas de abatimiento y cansancio.

"Díganme señoritas, ¿qué desean?" Apoyó sus brazos en el sillón, dirigiéndome una mirada fría.

"Estamos buscando al padre de Anna. ¿Sabría decirme dónde podría estar?" En sus ojos pude ver un destello y sus labios formaron una mueca malévola. Me puse rígida, mientras que él se acomodaba mejor en el sillón, incluso las marcas de abatimiento y cansancio se borraron.

"Samuel. El buen y viejo amigo traidor. Mi querida sicaria, si yo le viese, te lo entregaría esposado. Te lo dejaría en uno de los corrales cuando el sol más pega y te prestaría las mejores armas para terminar con su vida. Ese desgraciado... traicionar a su Rey. Como su mano derecha, haría lo necesario para la justicia."

Asentí cautelosamente y con una fría despedida nos marchamos de aquel lugar. La siguiente vez le rebano la cabeza.

Ya atardeciendo, comimos unas cuantas bayas del bosque y regresamos al centro de la ciudad. En la calle de los herreros vivía Frost, encima de su herrería.

Nos invitó a su casa y nos dio de cenar. A pesar de su cuerpo lleno de cardenales y quemaduras, era un humano corpulento y ágil. Me gustó desde el primer momento.

Anna se sentía animada y feliz mientras que Frost contaba las trastadas que hacía su padre cuando era más joven. También contó unas cuantas de Alex, las cuales guardé en el corazón con cariño. La compañera de Frost nos sirvió una cena riquísima y no pude menos que alagarla. Terminé el vaso de vino y carraspeé, para aclarar la voz.

"Siento Frost por preguntarte esto, pero, ¿sabes dónde puede estar Samuel?" Volví a beber del vaso del vino, que había vuelto a llenarse. Me apoyé contra la silla, sintiéndome un poco mareada.

"Claro que lo sé, está debajo de tus pies." Perdí la consciencia.

Lukan

Miré hacia abajo, teniendo una panorámica impresionante del bosque en su estado más salvaje.

El segundo al mando de mi manada de me acercó.

"¿Pensando en aquella elfa?"

"Sí, pero realmente no era una elfa. No tenía su olor. Pero desprendía un aura tranquilizadora y poderosa. ¿La has visto manejar las armas? Impresionante.

"¿Enamorado?" No respondí.

"¿Cómo van las cosas?"

"Han venido las armas junto con los combatientes. Estoy deseando que esto empiece."

"Paciencia hermano, aún queda hasta el 28, en luna llena. Dos semanas y el pacto será roto."

Jonathan

Me crucé de brazos, procurando parecer intimidante. El Rey estaba furioso y la bruja también.

"¡¿CÓMO SE HA PODIDO ESCAPAR?!" Gritó.

Dos de mis soldados estaban arrodillados, enfrente del trono. Ellos eran los culpables de que se les haya escapado Alex.

"¡Jonathan!" Vociferó el Rey.

"¿Si Majestad?"

"¿Cómo va la búsqueda de Samuel?"

"Su sicaria y la niña están en su búsqueda."

"¿Sicaria?"

"Si Majestad, de ojos morados y pelo azabache. Iba vestida de negro."

La bruja, ejem, Catherine tensó los labios, formando una fina línea.

"¡ELISABETH!" Gritó enfurecida. Dios mío el dolor de oídos que tengo.

"¿Quién es Elisabeth?" Exigió su Majestad.

"La compañera de Alex, la cazadora de vampiros."

N/A: ¡Tu tutú! Ya os he dejado pensar en algo. Esto se calienta. 0.0, aunque terngo que admitir que es un capítulo corto.

Qué rápido se pasa la semana...

Bueno, varias cosas.

1. Hace mucho leí por recomendación de una escritora una novela llamada Convicted y me gustaría que lo leyeseis. Está muy bien, es algo nuevo. Dejad algún comentario, que los escritores nos alimentamos de eso.

2.Veo muchas lecturas, pero no muchos votos y comentarios. ¿Podría algún lector fantasma salir a la luz? GRACIAS.

3.La Leyenda de los Lobos Guardianes está en total remodelación. Hay muchas más ideas y estoy deseando terminar con esta.

Bueno, creo que no hay más, un beso desde el tejado.

Reinota