intocable [l.hemmings] // Español //

0.2

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cada vez que ella reía,

esperaba que él estuviera observando.

no que viera que ella era feliz,

pero tal vez, solo tal vez,

él caería rendido por su sonrisa, 

igual de fuerte que ella caía rendida por la de él.

.

/ fleur /

''Sabes Fleur," mi amiga Payton comenzó, "los chicos encuentran a las chicas más atractivas cuando sonríen." ella metió la piruleta de vuelta a su boca mientras balanceaba sus piernas hacía delante y hacía atrás.

Payton y yo estábamos sentadas en la rama de un árbol justo al lado de la escuela. No era un lugar secreto ni nada, solo que nadie venía allí. Nunca supe porqué, siempre he pensado que tenía un precioso paisaje. La larga hierba era más verde de lo habitual, incluso fluorescente, y las coloridas plantas no pasaban desapercibidas.

Suspiré "Confía en mi Pay. No funcionaría, incluso si lo intentara."

Payton no conocía mis extraños sentimientos sobre el chico del autobús y me gustaba de esa manera. Payton era mi amiga y todo eso, pero a veces necesito guardar esas cosas para mi misma. Ella podría pensar que tengo alguna oportunidad con él.

"¿Qué quieres decir con que no funcionaría?" Ella preguntó antes de sacar la piruleta de su boca, mirándome, "¿No funcionaría en quien exactamente, Fleur?"

Mi mente empezó a buscar excusas desesperadas que pudieran maquillar el desliz de mi lengua. "Oh, ¿he dicho eso? Quería decir que la hija de la amiga de mi prima lo intentaría. Yo definitivamente no lo intentaría porque no tengo interés en los chicos, ¿sabes?" Instantáneamente me golpeé en la  cara por mis palabras. Era buena  para mentir en algunas cosas, pero nunca he sido buena en mentir sobre cosas concretas y a menudo no tenían ningún sentido.

Payton rió por lo bajo y me lanzó una mirada de complicidad. Odiaba cuando lo hacía porque eso significaba que creía que sabía algo. "Fleur, está bien si te gusta alguien, sabes, no voy a dispararte por ello."

Negué con la cabeza, esperando que lo dejara estar. No me gusta hablar de estas cosas con ella. Es extraño porque se que nadie jamás podrá quererme.  Nunca estuve enamorada y nadie estará enamorado de mi. A veces la gente esta hecha para estar sola y supongo que he aprendido a aceptarlo.

-

"¿Qué decías antes de que los chicos encontraban la sonrisa de una chica atractiva,?" Empecé, caminaba con Payton hacia la entrada de la escuela, "¿es cierto, o es algo que las chicas asumen?"

Mi amiga rodó los ojos y declaró, "Fleur, si tienes puesto el ojo en alguien, por favor, dímelo. No entiendo todo este misterio. Si, a los chicos les gusta la sonrisa de una chica."

Rechacé mentalmente el decir algo sobre el chico del autobús a Payton. No quería su ayuda y no la necesitaba. No quería hacer nada al respecto del chico del autobús. Aprendí a querer algunos rasgos que él tenía. Era amable y siempre se aseguraba de disculparse cuando se chocaba con alguien. Era divertido y hacía algunas bromas en las clases que tenía con él. Era inteligente y mi profesora de matemáticas siempre le felicitaba por conseguir tantas A's. Creo que su encantador aspecto solo era un bonus más junto a su personalidad.

"¡Fleur!" Payton gritó, chasqueando sus dedos delante de mi cara. "Estabas es tu mundo, como siempre. Me voy a casa. ¿Estás segura que no quieres salir un rato? A tu madre no le importará."

Suspiré, "No, solo quiero un poco de tranquilidad, Pay. No me apetece hacer mucho esta tarde."

"Nunca te apetece hacer mucho." Gimoteó y sonrió, caminando lentamente fuera de la escuela.

Y entonces le vi, otra vez. Se estaba despidiendo de sus amigos y caminaba hacia las puertas de salida de la escuela. Caminaba hasta su casa de nuevo, como él siempre hacía cada tarde. Estaba riendo por algo que su amigo le había chillado. Y recordé lo que Payton me dijo. Los chicos encuentran atractivo la sonrisa de una chica.

"¡Te veo mañana, idiota!" Payton gritó antes de girarse.

Forcé una risa, lo suficientemente alto para que él me escuchara. Tal vez él me miraría y vería la sonrisa en mi cara. Tal vez le gustaría mi sonrisa y querría saber mi nombre como yo quería saber el suyo. Y tal vez, si sonreía todos los días, él se enamoraría de mi sonrisa, del mismo modo en que yo me enamoré de la suya.