Harry Potter y el Apocalipsis Muggle

Capitulo 22

Juramento de Sangre

Fijo su mirada a la persona que tenía a un lado y al reconocerla instintivamente buscó su varita, pero fue inútil, entonces dijo, -¡No.. por favor!.. ¡Ya no me torture más!.. ¡No se si lo aguante!..-

Hermione tenía una cara de terror estaba derramando gruesas lágrimas, entonces la Señora Parkinson, bajo la mirada, estaba muy asombrada por el terror de la castaña, y sintiendo un peso en su estomago dijo, -Yo.. no te voy a torturar.. yo.. soy Lysandra Parkinson.. soy la madre de Pansy.. y quería.. oh lo lamento tanto.. lamento haberte hecho sufrir.. yo.. fui hechizada..-

Hermione trato de tranquilizarse pero sentía su corazón palpitar muy rápido, -Lo lamento mucho Hermione..- la castaña abrió sus ojos sorprendida al oír su nombre y contesto débilmente, -Usted sabe.. mi nombre.. ¿Qué paso?.. solo recuerdo estar amarrada.. y usted me estaba torturando.. ya mi cuerpo no respondía.. y después sentí que se me desgarraba todo desde adentro.. y luego ya no pude abrir mis ojos.. luego tuve un sueño muy raro.. Harry.. el.. su magia se descontrolo.. y estaba mal.. y quería que parara.. y luego no se todo se desvaneció..-

La señora Parkinson se sentó en la misma camilla que Hermione y dijo, -Has soportado muchas cosas.. eres una jovencita excepcional.. borrarle la memoria a tus padres es algo que te ha causado un gran dolor que estas sufriendo en silencio.. el sacrificio que haces por todos sin esperar nada a cambio es algo muy noble.. tienes toda mi admiración.. y sobre todo el que le hayas ofrecido tu amistad sincera a mi niña.. luego de haberte hecho la vida imposible por mucho tiempo.. te lo agradezco mucho..-

Hermione ya tranquila dijo, -Pansy es una excelente persona.. solo estaba.. obligada a ser mala.. por costumbre.. es una amiga maravillosa..- Lysandra tomo una mano de la castaña y apretándola delicadamente le dijo, -Te compensaré por lo que te hice.. tendrás en mi.. claro si tu lo aceptas.. a una guardiana.. a una protectora.. ¿Me aceptas?-

Hermione asintió sin entender completamente, entonces sintió su mano quemarle y al safarse de la mano de la señora Parkinson vió su mano ensangrentada y asustada dijo, -¿Pero que.. ¿Qué me hizo?..- Lysandra le contesto, -Te he dado mi juramento de sangre.. no dejare que te pase nada Hermione.. pero.. esto quedará solo entre nosotras.. ¿De acuerdo?-

La castaña aturdida le dijo, -¿Juramento de sangre?.. yo.. no puedo aceptarlo.. no quiero a nadie en peligro- La señora Parkinson sonriendo y acariciando el rostro de Hermione le dijo, -Nadie estará en peligro nena.. te lo he jurado.. se que eres terca y te pondrás en mil y un peligros.. y más por el ojiverde testarudo de Potter.. pero en lo que yo pueda no dejare que te pase nada..-

Hermione estaba por replicar cuando la Señora Parkinson saco de nueva cuenta su varita y la hechizo para dormirla, después ella, se fue descansar, noto a su hija perdidamente dormida, sonrió y se acostó junto a ella, a pesar de todo la vida le daba una oportunidad más, tener a su hija viva y a su lado era glorioso, pero sin querer una lágrima rodó sobre su mejilla, recordar a su esposo y saber que no lo volverá a ver, era doloroso.

Al otro día, el Castillo de Hogwarts amanecía más frío que nunca, un azabache que no había dormido, se levantó temprano para ir a ver a su castaña, estaba por entrar cuando se encontró a Ron junto con Ginny afuera de la enfermería, tenían un semblante preocupado y serio, Harry al verlos sintió un dolor en el pecho y dijo, -Hola Chicos.. ¿Qué paso?..-

Ginny trago saliva y dijo, -Harry.. es que nadie sabe.. como.. fue.. me levante temprano y vi a Ron salir, lo seguí y los vi.. a..- El pelirrojo la interrumpió, -¡Ginny!.. yo.. bien.. yo y.. estoy enamorado.. no deberías seguir a nadie.. es de mala educación- su hermana le replicó, -Si no lo hubiera hecho no me hubiera enterado.. tu y.. y.. ¡Astoria!..- Harry sonrio, se había imaginado lo peor.