Capitulo 26

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Una información preciada

Diez minutos después entró Lucios alterado y atrás venía un doctor, quien la revisó, entonces Cissy dijo,
-¿Lucios?.. ¿Qué pasa?..- su esposo serio dijo, -¡Potter!..-

Cissy con asombroso control de si dijo, -¡¿Potter?!.. ¿Qué..-, no termino porque fue interrumpida por el doctor que dijo, -La señora se encuentra bien.. no presenta ningún mal físico, le pido que descanse... uno o dos días..., así que me retiro..-

Lucios ablandando el rostro dijo, -Bien, Puede Retirarse..- Cissy se recostó nuevamente y pensando bien sus palabras dijo, -¿Qué pasó?.. ¿Seguimos en Egipto?..- Lucios negó con su cabeza y acostándose al lado de su esposa dijo, -No querida.. estamos en Rusia.. fuiste atacada por Potter.. pero lo bueno fue que no te hicieron daño..-

Cissy que ya sabia por donde iba la conversación dijo, -¿Atacada?.. solo recuerdo estar en mi tienda de campaña.. estaba contestándote una carta.. y luego... nada.. hasta que despierto aquí..-

Lucios se recostó en el pecho de su esposa y cerrando los ojos dijo, -No te preocupes Amor.. ya tengo en marcha mi venganza.. y al mismo tiempo tengo la distracción perfecta con la cual Potter no se meterá más con mis planes..-

Cissy sintió algo raro en su estomago y dijo, -Excelente cielo.. y ¿Qué es lo que harás?.. ¿Necesitas ayuda en algo?..-
Lucios sonrió, siempre podría contar con su esposa, entonces le dijo, -Ahora descansa.. pero pronto tendrás a alguien con quien divertirte.. no tardará en llegar.. y cuando así sea.. te diré que hacer..-

Cissy sonrió forzadamente y dijo, -Claro cielo.. tu me avisas.. ahora deseo ducharme.. ¿Quieres acompañarme?-
Lucios se levanto despacio y acomodándose para ver a su esposa a los ojos dijo -Muy tentador.. Si.. solo bajaré a mandar una carta y me uno a ti.. adelántate ¿Si?- Su esposa asintió y se levantó para ir a preparar el baño.

Entonces Lucios bajo a su despacho y al entrar tomó un pedazo de pergamino y escribió escasas palabras, al terminar la envió con su rara pero elegante lechuza y volvió a subir para estar con su esposa, algo que necesitaba con desesperación.

En Hogwarts se encontraba Ronald y Astoria buscando a Hermione, cuando se encontraron en el séptimo piso a Harry que recargado en una pared lloraba desconsolado, se le acercaron y este al sentirlos se limpio con rudeza las lagrimas, su amigo le pregunto como estaba, y el azabache solo asintió.

Astoria entonces habló, -Potter.. solo mírate.. estas muy mal.. tienes una ojeras horribles.. estas pálido.. y parece que no has comido en días.. ¿Crees que Hermione estaría feliz de verte así?-
Harry solo respondió, -Nadie tiene idea de como la extraño.. de como desearía abrazarla y no soltarla jamás.. tengo que encontrarla.. ella siempre estuvo para mi.. y yo.. soy un inútil.. la he perdido..-

Ginny que había llegado con ellos y escuchado al Ojiverde lo interrumpio,
-Harry.. la encontraremos.. ella siempre estuvo para todos nosotros.. pero debes descansar.. traigo buenas noticias.. vengo de la enfermería y me dice Madame Pomfrey que la sangre de la varita de Hermione no es de ella.. de hecho no es humana.. es de algún animal.. debe seguir viva.. ven vamos a que te limpies y duches.. Minerva convocó una junta después de la cena.-

Todos asintieron cada quien regresó a su Sala Común, Ron acompañó a Astoria y se despidió con un beso en la mejilla para ir a su dormitorio.

Pansy estaba harta, Cormac era un verdadero patán, siempre hablando de él como si fuera el centro del universo, lo había encontrado en el Gran Comedor, unos minutos antes de la cena, por lo que había aprovechado para acercársele y tratar de sacarle información, pero cada vez estaba más segura de que solo era un idiota presumido y no tenia nada que ver con el espía Mortifago.

Harry Potter y el Apocalipsis MuggleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora