Volvemos Al Pasado ↬PrivilegioDeAmar²

»17.Hotcakes«

†Altagracia Sandoval†

—Bueno, eso seria todo por hoy.  Ya quedaría todo para la próxima junta. —me levanté de la silla y acomode un poco mi jeans. —, entonces, gracias por asistir.

Salí de la sala de juntas y me encontré con Isabella.

—Tía tienes que firmar unos papeles y contratos, ahmm... También tienes que hablar con unos proveedores y las personas del departamento de evaluación territorial quieren una copia de cada una de las construcciones y contratos que ha hecho la empresa lo que va del año.

Suspire.

—Isa, dile a Nelly que se encargue por favor de las copias y las envié directamente al departamento de evaluación, la cita con el proveedor ¿a que hora es?

—Diez treinta.

—Bien, a las diez treinta que esté en mi oficina si se retrasa un minuto no lo dejen pasar, si llega antes no importa quiero que a las diez treinta esté entrando a mi oficina. —la miré y sonreí. —, ¿tienes los papeles?

—Sí, aquí están. Necesito que me des la carpeta con los documentos que te di ayer ya tengo que entregarlo y sacar algunas cuentas, y...esta carpeta me la tengo que llevar ya.

Llegamos a mi oficina, entré y fui directo a mi escritorio. Tomé una pluma y firmé donde Isabella me indicó.

—¿Algo más?

Negó.

—Tengo que hacer una llamada.

—Me prometiste ayudarme en lo de la boda, y nisiquiera sabes cuando es ¿cierto?

Dejé de ver mi celular y la miré. Tiene razón, ni sé cuando es la boda, vi la invitación que me llegó pero no me di cuenta de la fecha además de que he estado súper ocupada y de todo lo que pasa, Verónica, Maitee, los anónimos y todo eso me tiene agobiada.

—Entiendo..—bajó la mirada y se retiró.

—Isa..—la llamé pero siguió su camino.

Busqué en mi agenda el número de Manuel Russo.

—Señor Russo, ya voy para allá estaba en una junta a la cual tenía que asistir y no lo hizo.

—Estaba ocupado Sandoval.

—En quince minutos estoy allá. —colgué la llamada y miré la hora. Ocho cuarenta y siete, a las diez tengo que estar aquí en la empresa nuevamente.

(...)

—Altagracia Sandoval.—dijo el digno de confianza, el tal Trivge Vera.

—Señores..buenos días. —los dos se levantaron, y Russo sacó la silla que quedaba disponible en la mesa.

Me senté en ella.

Trivge esta igual que hace ya tres años. Buenisimo. Si él fuera sardina y yo gato...nada Altagracia, estas comprometida.

No deja de mirarme, y la verdad me intimida su mirada sobre mí.

—Un placer tenerla aquí Altagracia.—dijo Trivge.

Sonreí.

—Vamos al punto de la reunión, tengo unas cosas pendientes en la empresa. —dije sin importancia. No sé por que no pudieron realizar esta reunión en la empresa.

—Ordené hotcakes para usted. Espero que le gusten los hotcakes.

“Altagracia, ¿no y qué no te gustaban los hotcakes?
No me gustaban, pero es por tu culpa Harrison. Antes solo los comía cuando debía hacerlo, pero ahora soy una adicta a los hotcakes con...
¿Cobertura de fresa? —asentí y lo miré.”