Capítulo 22 *Ian, la promesa y un secuestrador misterioso*

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Narra Ian

RECORDANDO

Siempre he estado enamorado de Kiara y, claramente, me he querido casar con ella. A mis ojos, ella es demasiado hermosa, linda, amable, carismática y como su familia es rica, pues mi padre siempre ha tenido la idea de que uno de nosotros tres se iba a casar con ella, tenía mis fantasías con la boda y mucho más...

Pero cuando me enteré de que el elegido era mi hermano pequeño Akihito, estaba lleno de celos y furia, por lo que nos peleamos muy en serio. Esta fue la pelea más grande que tuvimos en toda nuestra vida.

FIN

En la actualidad, estoy oyendo a mi padre decir que ella, para salvar a su amiga, tiene que casarse conmigo. No me importó el por qué, pero sí que me alegré muchísimo porque uno de mis mayores sueños se iba a cumplir.

- Me casaré contigo... Pero que sepas que es sólo para salvar a Jara.-Avisó Kiara.

Conteniéndome, salí de la sala de estar y fui a mi habitación, la cual está insonorizada, permitiéndome el lujo de gritar y saltar de alegría, no podía estar más feliz en ese momento y, tengo que reconocer que estaba como una chica.
Al rato, salí de la habitación más calmado, fui hasta donde los dejé, pero me llevé una gran sorpresa, ellos ya se habían ido. Me enteré de que se fueron rápido, porque no querían perder más el tiempo en buscar a su amiga...

Narrador

Toda la patrulla de la familia de Kei, Kiara y el mismísimo Kei, se pusieron rápidamente en marcha hacia donde se encontraba Jara, que, por suerte, antes del secuestro se llevó su móvil y todavía estaba encendido. Kiara estaba nerviosa, ella no sabía lo que iba a suceder y recordó lo que le dijo el padre de Kei antes de que ellos salieran:

Narra Kiara

"Cuando encontréis a vuestra amiga, Señorita Kiara, uno de mis hombres os traerán y así podréis casaros con mi querido hijo, Ian", en ese momento yo tan solo asentí y corriendo me marché al encuentro de Kei, pues no quería hablar del tema.

Sentí un pequeño escalofrío, Kei notó mi estado y me dio la mano, pronunciando unas palabras apenas audible: "No te preocupes, estaré aquí y Jara regresará sana y salva... o....." Burrrrmmm, el coche se paró, maldije para mis adentros y en el futuro me arrepentiría por no haber escuchado esas palabras, y nos bajamos encontrándonos a una persona frente a una casa abandonada, aquella persona....

Kiara: ¡¿CÓMO HAS PODIDO?! ¡¡¡¡TE VOY A!!!!

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Todo comenzó en mi 16 cumpleaños (En Corrección)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora