Secretario Kim

Capítulo 4

*Cuando el texto esté en este tipo de letra, serán recuerdos*

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— Hyung, despierte.

Escuche a lo lejos la voz de mi hermano haciendo que abra lo ojos.

Me encontraba todavía en el suelo ya que soy muy pesado para Jungkook, pero tenía una sabana para arroparme y mi hermano al lado mio con un algodón con alcohol en las manos.

—Mmm, que pasa kookie.– le dije con voz ronca haciendo que a mi hermano se le cristalizaban los ojos.

Al fijarme en eso me senté con cuidado, le extendí mis brazos y lo mire con cariño.

— Ven aquí kookie.

                                      🐺

Nos encontrábamos en el parque, era un día lunes en la mañana, el día estaba nublado pero no hacía mucho frío.

Yo tenía diez años y Jungkook tres años.
Estábamos jugando en la resbaladera, cuando llega una familia y se va a jugar en los columpios.

— Hyung, le puedo hacer una pregunta.

— Por supuesto kookie, ¿qué desea saber mi lindo hermanito? – le dije con una sonrisa en el rostro.

— ¿Porqué yo no tengo papá?

Me sorprendí con la pregunta que me realizó.

— No es que no tengas papá kookie, es que... – fui interrumpido por el.

— No mienta Hyung, mamá dice que mentir es de niños malos.

— Lo sé kookie, mira tu eres feliz.

— Claro Hyung, soy muy feliz con usted y mamá.

— Y así va a ser siempre kookie, siempre voy a estar contigo.

— Lo promete Hyung.

— Lo prometo mi lindo hermanito.

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Ese mismo día le hice prometer a Jungkook que nunca más se iba a dejar pisotear por nadie.

Ese mismo día le hice prometer que iba a cambiar.

Ese mismo día le prometí que nunca más estará solo.

Al siguiente día

— Hyung, se encuentra bien.

— Si Hoseok porque la pregunta.

— Hyung, tiene ojeras y está un poco pálido.

Me lo quede observando, tenía razón, estaba cansado, no había comido nada desde ayer, llamaron del hospital para decir que mi mamá tuvo una recaída, además de la pelea de ayer.

—No me pasa nada Hoseok, estoy bien.

—¿Seguro? No desea una pastilla o un café, le puedo preparar un café.

— No te preocupes después voy yo. – termine de hablar y en eso sale mi jefe.

— Seokjin realizaste el archivo que te pedí.

— Si, ya lo voy a imprimir para entregárselo.

Me quedo mirando fijo a lo que yo agacho mi cabeza, me veo horrible lo se, no hace falta que me lo digan.

— Okey, terminas eso y pasas por mi oficina – y sin más se regreso por donde salió.

Lo que faltaba, solo espero no haberme metido en problemas.

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