Una historia de amor entre un empleado y su jefe.
Kim NamJoon líder y cabeza de prestigiosa empresa.
Kim SeokJin su nuevo secretario.
¿Podrá surgir un amor entre estos dos?
¿Qué les deparará el futuro ?
¿La escritora será capaz de terminar su lib...
Hoy es el último día del viaje de negocios de la empresa Kim, y si me preguntan, no, no he vuelto a ver al dios griego, lo cual no es algo tan malo como parece y si como escucharon no lo es, saben por qué, porque mi espectacular y escultural jefe a sido todo un caballero con todas las de ley, atento, lindo, muy cordial y hasta un poco cariñoso me atrevería a decir, haciendo esos pequeños detalles que dejan a toda persona con el suspiro en la garganta, el corazón regocijante, unas cuantas mariposas inquietas en el estómago y con pensamientos que te hacen cuestionar todo lo que sucede, pero no es lo que creen, no me gusta mi jefe.
O eso creo...
— Seokjin – dijo mi jefe haciendo su peculiar movimiento de mano para que me acercara donde estaba el.
— Entreguele el documento al caballero para que firme su acuerdo con las empresas Kim, el cual tiene todos los requisitos completamente explicados para que no exista ningún mal inconveniente
Hice exactamente lo que mi jefe ordenó dandole una copia de aquel documento al abogado del empresario con quien estamos para que revise dicho papel.
— Todo en orden Héctor – dijo el señor a su abogado — Así es señor Nakamoto, puede firmarlo – una vez dicho esas palabras el empresario firmó el acuerdo y la reunión dio por terminada.
Todos nos levantamos de nuestros lugares y nos dispusimos a salir, en las afueras de las oficinas del señor Nakamoto se encontraba su secretaria.
— Alicia, acompaña a los señores a la salida y cuando regreses archivas este documento, contactas al banco para que se realice la inversión correspondientes a las empresas Kim y después de eso pasa por mi oficina.
Dicho eso la señorita nos acompañó hasta los ascensores, una vez adentro Alicia comenzó a tirarle miraditas atrevidas a mi jefe, y claro el señor coqueto como si nada pasara le respondió con una sonrisa, indignado de ver tal espectáculo me le apego un poco a mi jefe al punto que nuestro hombros se tocaban, a lo cual él soltó una risita disimulada, una vez afuera de la empresa mi jefe me preguntó.
— Bueno Jin, terminamos nuestro trabajo aquí – cuál trabajo ser coqueto con todas las secretarías de tus socios, respondí en mi cabeza.
— Vamos a almorzar y a caminar un rato, que te parece – especuló mi jefe.
— Me parece excelente, vamos – respondí con una sonrisa tratando de disimular los inuales celos que me provocó esa secretaria.
Tomamos un taxi y nos dispusimos a un restaurante, entramos, nos designaron una mesa y nos llevaron nuestros menús.
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Una vez llegó nuestra comida, nos dispusimos a disfrutar de tal espectacular plato, conversando de cosas triviales y manteniendo en mi mente que mi hermano no me responde el ultimo mensaje que le mande preguntando por mamá.
Buenoooooooo dejaré esto aquí y me iré lentamente...
Espero disfruten de este capitulo y vayan preparandose para el siguiente porque van a botar una que otra lagrima.
L@s quiero muchooooo, besos en el anastacio uwu ♥️
