Secretario Kim

Capítulo 12

-Vaya, parece que no me voy a arrepentir sobre nuestro emprendimiento Señor Kim -dijo aquel señor.

-No se preocupe, lo que estamos planeando va a ser muy positivo para el mercado - respondió Namjoon - Eso espero, no me gustan los errores, y sobre todo si de esa empresa se vive mi familia - dijo.

-Están en las mejores manos, ¿Verdad Seokjin? - preguntó mi jefe.

-Así es -contesté.

Tres horas más tarde la reunión terminó, y pudimos dirigimos a nuestra habitación para cambiarnos y acostarnos a dormir.

☁️

Son las 7:00 am, una perfecta hora para salir a caminar y distraerse, desayunar en alguna cafetería cercana, regresar a tu casa para ducharte y así empezar un nuevo día de trabajo, despejar tus dudas con el melodioso cántico de los pájaros y el sonido de las hojas o algo así parecido fue lo que me dijo me jefe después de despertarme, encontrando lo perfectamente vestido con ropa deportiva, esperando mi santa voluntad de levantarme y acompañarlo en su caminata matutina.

Y así es como me encuentro yo ahora, 7:30 de la mañana trotando en un parque de un país que el cual no conozco nada, a lado del escultural cuerpo de mi jefe envuelto en una fina capa de sudor con los auriculares puestos y su mirada al frente.

El sonido de los pájaros hace regresar mi vista al frente, pero desgraciadamente termino chocando con otro chico que venía en mi dirección y al parecer, también con la vista perdida.

-Disculpa ¿Te encuentras bien? -pregunté levantando me y dándole la mano.

-Si. Estoy bien, gracias -dijo aquel chico que por primera vez pude ver su rostro.

Era de piel un poco bronceada, con facciones finas y la cara un poco alargada, pero muy sensual, su cabello tirado hacia atrás dejando ver su perfecto corte paralelo, era de espalda ancha, un cuerpo esculpido por los mismos dioses, sus ojos eran de color celeste claro, como si estuvieras viendo el cielo completamente despejado, sin ninguna nube, en una tarde soleada.

-Disculpa, su nombre - dijo el susodicho.

-Seokjin, Kim Seokjin.

-Un gusto Seokjin, me llamo James, un gusto.

El gusto es mi papasito.

-Jin, te encuantras bien -dijo mi jefe.

-Si, estoy bien.

-OK, vamos - dijo jalando me del brazo, sin dejarme despedir del dios griego.

Y así sin más preámbulos siguió mi tarde aburrida, ejercitandome con mi jefe, reuniones aburridas en la tarde y sin más que hacer acostarnos a dormir.