STRAIGHT. Not so much. [LuMin // XiuHan]

I. SWEET MOON.

Ahí se encontraba nuevamente, ya había perdido la cuenta de todas las veces en que había sido plantado en la cafetería de la esquina "Sweet Moon" en un conocido panorama: La taza de café americano, fuerte y sin azúcar, completamente vacío, una tarta de lo que fuera servida tan sólo en un cuarto de su porción original; y por último, la amable y amorosa XiaoTong preguntando sí deseaba más café. 

—¿Más café, Han?

—No, gracias Tong. Creo que es hora de que me vaya ¿Me traes la cuenta por favor? —A pesar de que se encontraba en una situación recurrente, el mal sabor de boca que sentía cada vez que su amigo le dejaba plantado sin aviso alguno seguía siendo amargo y repulsivo, nada comparado con el café.

—¿Minseok tampoco apareció hoy? —La muchacha retiró de su libreta sus notas referentes a lo consumido por el muchacho y simplemente lo rompió en pedazos para después guardarlo en el bolsillo de su delantal de camarera, antes de obtener una respuesta por parte de Lu Han, Tong volvió a hablar. —Se ve que Minseok es una persona ocupada, te aseguro que nuevamente tiene una excusa perfectamente válida para no haberse presentado sin avisar antes. La casa invita hoy solo si quitas esa expresión de melancolía y le regalas una sonrisa al mundo, hay personas envidiando tener una sonrisa como la tuya y tú la desperdicias de esa forma. Arriba el ánimo hombre, o considerare dejar de servirte americano las próximas veces que te presentes aquí.

Lu Han sólo pudo reír ante las ocurrencias y alegría espontánea de la muchacha, siempre haciéndole sentir mejor consigo mismo en el momento en que su denominado amigo le dejaba plantado. Había considerado anteriormente cambiar de cafetería, la humillación de ser reconocido por "el sujeto al que siempre dejan plantado" no era menor, sin embargo la muchacha que siempre le atendía hacía parecer su humillación como algo menor y siempre tenía nuevos argumentos para darle un consuelo, servicio que dudaba fuera ofrecido en cualquier otra cafetería. Desvió su mirada hacia su bolso y observó intacta la caja de chocolates que había guardado para su amigo: chocolate amargo, un surtido relleno con crema de cerezas y crema de menta. Sus favoritos. Sí había alguien quien merecía un regalo ahora era XiaoTong, aunque sea por compadecerse de su situación. —Gracias Tong, espero que te gusten los chocolates. Nos vemos pronto.

Dejando la caja de chocolates sobre la mesa salió del local dejando a Tong con sus mejillas ruborizadas y una sonrisa plasmada en sus labios.

Estando ya fuera observó su celular sin aviso alguno de su amigo. Se conocían apenas hace seis meses, Lu Han es agente inmobiliario, y en ese entonces se encontraba realizando un Open house de un departamento en el centro de Beijing, un lujoso edificio, un Duplex que se encontraba en el quinceavo piso. Una vista perfecta de la ciudad en un departamento amueblado, con clase y elegancia, el sueño de toda persona.

Ahí lo observó, estudiando cada detalle del arte de porcelana incluido en el departamento. Se acercó a hablarle, por interés comercial claramente.

—Contraté a una decoradora para que se encargara de la estética del lugar. Lu Han, para servirte. —Extendió su mano siendo inmediatamente aceptada por el muchacho de menor estatura.

—Kim Minseok. La verdad, es fascinante. Pero considero que el precio está sobreestimado. En Dubai, un duplex en las mismas condiciones y mejor arte se encuentra cercano al valor que ofreces.

—¿Significa que arruinarás mi negocio?