Los Demonios.

13

Deiman.
Todos aplaudieron cuando escuadrón el nombre de lucí. Su papa y yo nos paramos y le aplaudimos. Ella abrazo a unas chicas y subió al escenario.

Directora: ella resivira, el diploma a mejor jugadora del año, mejor estudiante y mejor alumna y compañera.

Ella recibió los diplomas, saludo a la directora y se tomaron una foto, bajo y se reunió con su generación. Su papa me abrazo de la emoción y yo igual a él. Estábamos gritando y celebrando a Lucí, el Auditorio era un caos, los chicos brincaban.
Ya una vez que terminaron las fotos dentro salieron todos, el papa de Lucí dijo que tenía que revisar la comida así que me dejo la bolsa de lucí y se fue. Estaba esperándola recargado en mi carro, cuando la veo salir, meto la bolsa en el carro y la atrapó cuando brinca para que le agarre. Le doy muchos besos.

Yo: Felicidades amor. Me siento muy orgulloso de ti, igual tú papa.
Lucí: Gracias donde está ?
Yo: Fue a revisar la comida.
Lucí: Ven vamos para que nos tomen una foto.

Fuimos con una de sus amigas y nos tomaron fotos, ella con la bata y el diploma. Y otras sin ninguna de las dos. Me gustaba pasar tiempo con ella. Ella se despidió de sus amigas y nos fuimos al carro, le abrí la puerta, deje la toga en la parte de atrás y me subí al carro.

Yo: ¿a dónde quiere ir bella dama?
Lucí: Falta rato para la comida... ¿Vamos a por unos helados?
Yo: lo que quiere mi bella dama.

Maneje hasta mi heladería favorita. Nos bajamos, agarre su regalo y lo metí con cuidado a su bolsa. Pedimos los helados y nos sentamos en las bancas de afuera.

Lucí: Amor te puedo tomar una foto?
Yo: Si, yo debo de traer tu celular.

Lo saque del saco y se lo pase, ella me acomodo y me empezó a tomar fotos.

Yo: Espera... Porque mejor no las tomas con lo que tienes en la bolsa...
Lucí: Que cosa?...

Metió la mano a la bolsa y me miró confundida, saco la caja de la bolsa. Empezó a romper el papel y me miró emocionada.

Lucí: No tenias porque amor...
Yo: Mira, te esforzaste tres años para salir con la mejor calificación. Se merece una recompensa. Es pequeña, yo quería regalarte una profesional.
Lucí: Muchas gracias....
Yo: Venga tómame una foto.

Me estaba peinando el pelo cuando escucho el sonido de cuando la foto se a tomado. La miro y me sonríe inocente. Me la muestra y está muy linda. Así la pasamos hasta que nos terminas el helado, nos subimos al carro y nos fuimos a su casa. Ella iba riéndose y feliz, siempre la quiero ver así. Y haré lo imposible por hacerlo.
Llegamos a su casa, entramos y estaba su papa con una cerveza sentado viendo un partido.

Cristopher: Deiman, quieres una cerveza?
Yo: Eh...

Lucí asintió, me giño un ojo y se sentó en uno de los sillones.

Yo: Si, gracias.
Cristopher: Mariet! Trae una cerveza.

Me senté enseguida de Lucí, me desabroche el saco y saque el celular. Me entregaron la cerveza y le di un trago.

Cristopher: Deiman, supe que estas en la carrera...
Yo: Si, dos de oyente y dos carreras.
Cristopher: Si, me asombra que haya personas que puedan llevar más de 1 carrera.
Yo: Si, cuando recién empecé se me hacía muy difícil, con mi hermana, el trabajo y las clases, pero luego se facilita, solo es acomodar bien los horarios.
Cristopher: Si, me dijo lucí que trabajabas en la empresa de tu papá, ¿de que es?
Yo: Es un bufet de abogados, pero hay muchas cosas, igual. Tenemos aquí el año y nos ha ido muy bien, tuvimos que abrir una sucursal aquí, mientras mi hermana se recuperaba y yo conseguía dinero para los tratamientos.
Cristopher: no tenían dinero?
Yo: No, bueno, si nos habían dejaos nuestros papas antes de morir, pero me lo entregaron cuando cumplí los 19. Y llegue de 18 recién cumplidos. Pero ya que empecé a trabajar puede pagar de poco a poco el medicamento, hice mi propio dinero, pago mis estudios y así.
Cristopher: Que tiene tu hermana?
Lucí: Papa....
Yo: No tranquila, esta bien... Los doctores no saben que tiene, piensan que un tipo de hongo que daña su sistema nervioso, hace algunos días iniciaron un nuevo tratamiento y ya está bien, se irá conmigo ya que no la puedo dejar con nadie más. Además ella quiere ir a ver a nuestros papas.
Cristopher: Oh, pues me alegra que tu hermana ya está bien.

Seguimos hablando de cosas comunes, deportes, películas favoritas etc. Hasta que sonó el timbre, Lucí se levanto y fue a abrir, entonces pego en grito.

Cristopher: Tranquilo...