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Deiman.
Salí de la casa de Lucí medio dormido, Javier se tuvo que llevar mi carro y yo me fui con el chofer en la camioneta. Al llegar a la casa, me tome un café. Agarre mi arma y me fui a la oficina.
Estaba en la oficina, me iba sentar en mi escritorio cuando entra Jairo.

Yo: no molestes, tuve una larga noche, hoy fue la graduación de Lucí y hubo comida en su casa.
Jairo: Lo siento, pero... Tienes que hacer un trabajo, se lo pediría a Lucí, pero es su graduación.
Yo: tú no perdonaste mi graduación.
Jairo: como sea, sales en 10.

Me lanzo un folder con fotos e información. Una vez que mis hombres estaban listos salimos, buscamos a un tipo. Jordan Cruz, mexicano de 29 años, drogadicto que se metió en algunos problemas con narcos y pidió ayuda de nosotros para cubrirle, pero no ha pagado. Resulta que es el tipo que tardó en pagarle a Lucí.
Las fotos lo mostraban hablando con otro cartel, esta es un caso especial, yo controlo todo lo ilegal en México, menos al cártel de Sinaloa. Sé que tienen invasores en la mafia, personas que trabajan con Jairo. Sé que él les deja trabajar, no los investigó. Pero se enojo cuando Jordan habló con ellos. Sé sintió "traicionado".
Pocos saben sobre esto, pero eh investigado a Jairo Popov, no sólo por tener mi apellido, si no por sus trabajos, es medio hermano de papa. Nunca confié completamente en el, hasta pienso que el tubo algo que ver con su muerte.
Cuando llegamos al lugar, no había nadie. Era una casa en medio de la nada, a las afueras de San Diego. Cuando entramos la casa estaba llena de drogas, jeringas, alcohol, dinero regado por el piso, al igual que periódico. Olía demasiado mal, estaba hecho un asco.

X: Señor, mire afuera.

Salimos, todos miraban el piso. Voltee y las marcas de las llantas estaban marcados. Se perdieron unos cuantos kilómetros. Estuvimos buscándolo por toda la noche, por todo San Diego, pero nada. Alguien le aviso que íbamos, las marcas en la calle estaban calientes aún.
4 de la mañana y nada. Algunos del equipo regresaron a buscar y entregar información. Los demás tratamos de seguir buscando.
Estábamos en una cafetería, todos tomábamos café, algunos hablando a sus casas, avisando que estaban bien y llegaban en la mañana.
Yo le hable a Lucí, tardó en contestar, pero lo hizo casi a lo ultimo.

Yo: ¿amor? ¿Te desperté?
Lucí: ¿qué....? No! Chanel, Michell, Zulema y yo fuimos al bar beer and party.
Yo: Te diviertes entonces...
Lucí:... Fuck You. You do not want To have problems with me.
(Vete a la mierda. No quieres tener un problema conmigo.)
Yo: ¿amor... Qué pasa? Estás bien.
Lucí: Shirhead... Fuck You.
( Gilipollas... Vete a la mierda.)
Yo: Voy para allá.

Agarre mis cosas y voltee a ver a los demás.

Yo: Nos vamos.

Todos nos subimos a los carros. Estuve apurando el tipo que manejaba por hora y media. Llegamos a las oficinas, deje las armas y me subí a mi carro, me apure lo que más que pude para llegar a ese bar. Cuando llegue vi a la policía afuera.

X: No puede pasar.
Yo: Mi novia está ahí.
X: Cual es su nombre.
Yo: Lucínda...
X: Esta en el hospital...

Me subí al carro y maneje hasta allá. Llegue y me encontré con Mariela.

Yo:¿qué pasó?
Mariela: La tiene retenida... Por violencia.
Yo: Donde está?
Mariela: En un cuarto, la trajeron porque vomitaba sangre. Ya está bien, solo era la bebida y los golpes.
Yo: Me la puedo llevar?
Mariela: No, se la llevaran a la comisaría, no dejan pasar a nadie. Pero te puedo meter 5 min.
Yo: Por favor.

Me guió hasta emergencia, saco al policía que estaba dentro, yo hacía como que estaba con otro paciente dormido, entre al cuarto y me cubrió Mariela.

Yo: Amor... ¿Qué pasó?
Lucí: No se... Ya me quiero ir, en unas horas tengo que estar con tu hermana...
Yo: Amor estas arrestada, goleaste a alguien, veré si estará bajo fianza.
Lucí: Estupidos policías.
Yo: Porque te peleaste?
Lucí: Querían besar a... a... a...
Yo: Chanel?
Lucí: Si, la querían besar, ella no quería... Luego se me empezó a insinuar.
Mariela: Ya Vamonos, Deiman.
Yo: te sacaré, si? No digas nada.

Salimos y luego entraron los policías. Se la llevaron arrestada, los seguí hasta la comisaría. Venía cansado, estaba en mis últimas.

X: Buenos días, que se le ofrece.
Yo: Quisiera saber si podía pagar la fianza de mi novia.
X: Nombre?
Yo: Lucínda.
X: Oh si, son $1000 dólares.
Yo: Efectivo?
X: Claro.

Le pase dos billetes, espere un momento y la vi.

Los Demonios.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora