Los dos chicos entraron a la habitación sin soltar palabra alguna,Silvana esbozó una media sonrisa mirándome a los ojos para luego tomarme de los hombros.
-No te preocupes,yo te llevaré a tu casa. -dijo y sonrió con algo de lástima.
-¿Tú qué? -dijo Jeff algo molesto.
-Eh dicho que la llevaré a su casa, ¿Algún problema? -preguntó molesta.
-Oh no -dijo mirándome- No pensaras irte sin darme lo que me debes, ¿Verdad? -agregó acercándose a mi.
-¿Qué? -pregunté histérica.
-Si -contestó serio- No puedes irte sin darme lo que me debes.
-¿Y qué cosa es eso? -dije mirándolo atentamente.
-Tu vida. -dijo con una sonrisa sádica en su rostro.
-¡Joder! -chillé furiosa- ¿Qué no te bastó con dejarme así? -le reclamé señalando mi estómago.
-Mira niñita emo,si no fuera por mi hermano te hubiese matado en el bosque. -dijo entre dientes- ¡Así que agradece que no te eh matado ahora!
-¡Pues vamos! ¡Hazlo ahora! -grité dando pequeños golpecitos en mi pecho indicando que me apuñalara allí mismo.
-¡Ya basta! -gritó el rubio con cansancio- Joder, ¿qué no se pueden llevar bien por un maldito minuto?
-¿Pretendes que me lleve bien con la persona que intentó matarme? -pregunté con frustración.
-Me largo de aquí. -soltó Jeff- Y tú vienes conmigo -dijo tomándome de la muñeca.
No pude siquiera despedirme de Silvana o de Liu ya que el imbécil de Jeff me llevaba prácticamente a rastras por el bosque,me apretaba fuertemente la muñeca mientras me llevaba a cinchones.Todavía me dolía la herida así que no aguanté y me tire al suelo de rodillas haciendo que él frenara en seco.
-¿Qué pasa? -preguntó en un tono frío.
-No...No puedo más. -respondí apenas apretando mi estómago para aguantar el dolor.
-¿Duele mucho? -dijo preocupado.
-Si... -dije y limpie una lágrima que se había escapado a causa del dolor.
-Está bien,te cargare. -dijo y soltó un suspiro.
-No,peso demasiado,luego te dolerá la espalda. -dije sin levantar mi mirada.
-¡Oh,vamos! estás perfecta. -carcajeó.
-¿Qué? -dije confundida por su bipolaridad.
-Que no estás gorda. -dijo y me cargo como en las películas por lo cual me sonroje.
-¿A donde vamos? -pregunté mirando su rostro.
-A la creepyhouse para que Slenderman te cure bien. -contestó concentrado en el camino.
-Oh... -dije distraída- Espera, ¿Qué? -dije exaltada.
-No se si lo conoces,pero Slenderman puede llegar a ser muy bueno. -dijo y rió.
-¿Slenderman? -trague saliva asustada.
-Tranquila,prometo no dejar que te haga daño.
-Está bien.
Después de un rato caminando llegamos a una casa en el medio del bosque,era antigua y parecía estar abandonada. Jeff abrió la puerta y al entrar en la casa me bajo de sus brazos y me llevó hasta una sala.