Llegamos a una especie de mansión en el medio del bosque,por su aspecto me di cuenta que era bastante antigua,Ben abrió la puerta y entro,al entrar pude ver que todo estaba limpio y en orden,me recordaba a cuando mi madre se obsesionaba con tener todo limpio,me puse a pensar en mis primos,en mis tíos,en mi madre
¿Me extrañaran?
¿Me estarán buscando?
¿Estarán bien?
¿Pensaran en mi?
Miles y miles de preguntas agobiaban mi mente pero mis pensamientos fueron interrumpidos por Ben,el cual me llevo hasta la sala y me ayudo a sentarme en un viejo pero cómodo sofá negro,se sentó a mi lado y me miro atentamente,yo baje la mirada algo incomoda
Ben:¿Porqué estás llorando?-me preguntó con un tono de preocupación-
Yo:¿Qué?-Dije confundida,me sentía mal,si,pero...no estaba llorando...¿o si?-
Ben: -Llevó su mano hasta mi mejilla-Estas llorando-dijo mostrándome sus dedos empapados-
Yo:Oh...-fue lo único que pude articular-Solo estaba pensando en mi madre...en si me extrañara -dije limpiando algunas lagrimas que seguían escapándose-
Ben:Tranquila,estoy segurisimo de que si te extraña y mucho -Dijo abrazándome-
Yo:Gracias Ben -dije abrazándolo-
Segundos después me separe de Ben y pude ver por encima de su hombro a un hombre muy alto,vestía un traje negro y elegante,sus manos le llegaban hasta las rodillas y no tenia rostro,era completamente blanco,me asuste y me pare preparada para salir corriendo pero no llegue a dar el primer paso ya que me caí a causa de una fuerte puntada en mi estomago y mi espalda,di un fuerte grito de dolor y lleve mis manos a mi estomago apretándolo fuertemente con la esperanza de que el dolor se fuera