Episodio 18: "Daniela y yo"

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Después de lo sucedido solo quería saber de ella, como estaba y como se sentía, así que fui a su casa. Una casa linda y grande 

ding dong 

Toqué el timbre dorado. Su mamá abrió la puerta a los 3 minutos -Hola, buenas noches señora, soy Ian 

-Sé quien eres, mi hija habla muy bien de ti bueno de todos ustedes 

-¿De verdad?-dije con una gran sonrisa y a la vez un poco sonrojado- Bueno, vine para ver como estaba ella.

-Que lindo de tu parte, pasa. Espero que ella quiera verte- dio la vuelta y se dirigió a las escaleras. Mi hija está en su habitación reposando, sube. Su cuarto es el primero del lado izquierdo de las escaleras.

-Okey muchas gracias señora- estaba realmente emocionado. Subí los 20 escalones  y cuando me encontraba arriba inmediatamente me di vuelta a la izquierda, allí estaba su cuarto era una puerta blanca, igual que las demás, pero con su nombre.

Toc Toc

-¿Quién es? -muy seria.

-Soy Ian -dije contento.

¿Qué haces aquí? Perdón pasa

Abrí la puerta y la vi sentada en la cama con un cobertor morado en sus piernas y su Laptop. Su cuarto era de color blanco con dibujos de árboles y aves verde pastel en la pared, junto a su cama un mueble pequeño con una lámpara y unos lirios en su jarrón, una televisión plasma colgada en la pared justo enfrente de su cama  y del otro lado de la cama dos sillones pequeños enfrente de la ventana con  unas cortinas beige. Al lado izquierdo de la pantalla estaba su tocador con un espejo grande y lindo, sus peines, perfumes, aretes, pulseras , labiales y un jarrón con tulipanes morados y la puerta de su armario; del otro lado una mesa verde con una computadora, su mochila y cuadernos allí así como su silla blanca. También tiene cuadros de flores en las paredes.

-Vine para ver como estabas 

-Físicamente bien, solo tengo algunos moretones en mi brazo; pero emocionalmente no

-¿Por qué? 

Se quedó callada un momento -Pues solo es por la vergüenza de que personas me vieran así -muy apenada-

Pero no fue tú decisión-me acerqué a su cama.

Pensaba que tal vez no fue su decisión pero si su culpa por no comer-Tal vez.

-¿Tal vez? ¿No habías comido?.

La verdad no, no comía mucho y vomitaba cuando lo hacía. Corría todas las mañanas para pasear a titan,- Sí, solo que no desayuné hoy  

-Eso explica todo.

-Dejemos de hablar de eso...por favor-con una voz muy linda y dulce.

-Tu cuarto es lindo, igual tu casa - aunque también pensé en decir "igual tú".

-Gracias-sonrió- mi cuarto es lindo pero mi parte favorita en la casa es el jardín

-¿Te gusta el aire libre?

-Sí, además de que me gusta sentarme en una silla y escuchar el sonido de las hojas moviéndose, el olor es fresco y es donde puedo jugar con titan; además veo el cielo y cuando es de noche observo las estrellas-con una sonrisa.

-¿Titan? 

-Es mi perro, es un pastor alemán.

-Wow, que bien

¡NO ES LA GRAN COSA!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora