Capitulo 1

252 16 3
                                    

Narra Jungkook

Grande, lúgubre, llena de gente y mierda. Todo reunido en un sitio llamado Londres.

Desembarque finalmente en el muelle de Londres gran haber recorrido el mar durante unos largos y excitantes cinco años. Pude ver las maravillas de cada parte del mundo, de cada rincón del globo, apreciando enormes monumentos como lo fueron La Meseta de Giza, la gran muralla China y la maravillosa Francia, en este ultimo presencie personalmente como después de tantos problemas y vicisitudes, dos amantes pudieron encontrar la felicidad con el otro.

Pero ahora me encontraba aquí en Londres. Uno de los Últimos parajes que aun se encontraban fuera de mi lista de lugares explorados.

Caminaba por las oscuras y monocromas calles de Londres, anonadado por su pesado ambiente y falta de alegría, comparado con la colorida y cálida India o China, recordada y alabada por su cultura exuberante y rica en color

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Caminaba por las oscuras y monocromas calles de Londres, anonadado por su pesado ambiente y falta de alegría, comparado con la colorida y cálida India o China, recordada y alabada por su cultura exuberante y rica en color. Este lugar podría fácilmente ser confundido por un constante duelo o ciudad enferma por cualquier turista como yo, o alguien acostumbrado a los colores como yo.

Mirara a donde mirara, solo podía encontrar personas pobres, ladrones, prostitutas y seres con pensamientos inhumanos que solo podria compararse con el actuar de una bestia. Ese era Londres, una tierra de corrupción, miseria y pecado.


¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Por fin llegue a una calle menos lúgubre y sucia, una calle que disimulaba muy bien la clase de personas (asquerosamente) ricas que allí habitaban.

Cansado de mi largo viaje decidí adentrarme a una cantina para beber una copa de tequila. Con un movimiento de mi muñeca llame la atención del cantinero, pedí mi trago y procedí a beberlo lenta y pausadamente.

. Al afilar mi vista solo pude encontrar aquellas bajezas de personas que la calle se esmeraba en ocultar. Hombres ricos, prostitutas, borrachos y personas que sin pudor alguno se comían unas a otras en aquel lugar sin importarles estar en presencia de publico.

Jungkook: asquerosa humanidad- escupí con desprecio en voz letarga para no llamar la atención de publico no deseado, pero la vida me deparaba otra situación

- puedo ayudarte en algo? Cariño- pregunto una mujer con voz sugerente y prendas provocativas. Mi vista apenas y la tomo en cuenta- no te había visto nunca por aquí, guapo. ¿Eres nuevo en la ciudad?- preguntó con claro coqueteo mal disfrazado

Jungkook: pierdes tu tiempo- simplifique brevemente intentando recalcar mi falta de interés hacia su persona- busca a alguien mas a quien fastidiar- exclame mientras llevaba el trago de licor por primera ves a mis labios, disfrutando del escozor de este al bajar por mi garganta.

- me estas rechazando?- pregunto un poco indignada la voluptuosa mujer. Siquiera tome en consideración la opción de responder ante mi clara intención, ganándole un rostro enrojecido por el cólera de la figura femenina- eres un maldito infeliz- escupió ella

Ignore todo rastro de importancia que pudiera darle a la mujer y proseguí a terminar mi baso de tequila. Pero nuevamente me vi interrumpido esta vez no por la mujer, sino por un tipo gigante que a kilómetros se veía pasado de copas

- oye, tienes algún problema con la dama? Imbécil- pregunto-grito el tipo un poco tambaleante junto a mi. Seguí fingiendo la ausencia de esas dos figuras que simplemente no me permitían tomar tranquilamente mi trago- además de imbécil, sordo- volvió a escupir

Jungkook: no quiero problemas, amigo- simplifique mirándolo de reojo. Al parecer nuestra conversación se volvió lo mas interesante del lugar pues todos ahora dejaron de hacer sus cosas para mirar y escuchar lo que provenía de nuestra dirección,- simplemente le indique a la "dama" que pierde su tiempo conmigo- finalice mi oración tomando un largo trago y colocando el vaso boca abajo en la mesa, saque el dinero y lo deje frente al cantinero ya dispuesto a marcharme.

- oh no, amigo. De aquí no sales vivo- amenazo el hombre mientras lanzaba el primer golpe con la mano derecha mientras me tomaba de la camisa con lo contraria.

Reaccionando rápidamente pude esquivar un golpe que probablemente me hubiera noqueado al tiempo en que devolvía la acción con un gancho izquierdo directo a la mandíbula del infeliz. Este sin embargo no logro esquivar mi ataque por lo que pasados cinco segundos un estruendo sordo, como la caída de un saco de harina resonó por todo el lugar.

- a el!- grito otro de los hombres que allí se encontraban. Casi todo el establecimiento se me vino encima en menos de un minuto. Aunque me doliera en el orgullo lo que pretendía hacer no tenía más alternativa. Me limite a correr.

Jungkook: maldita sea- escupí mientras corría intentando alejarme de esa jauría de bestias ahogadas en licor y porquería. Quizás podría derribar a dos o tres hombres a la vez gracias a mi condición física, pero enfrentar a mas Dr una docena de hombres bajo el efecto del alcohol era un tema muy distinto a tratar.

La única opción viable que veía era seguir corriendo como idiota por las calles de la ciudad, esperando que por su misma condición de embriaguez lentamente se cansara uno a uno de las bestias que me perseguían por una razón aparentemente cuestionable.

Jungkook: y todo por no aceptar a una prostituta- reí sin ganas por la ironía de mis palabras. Solo me limitaría a seguir corriendo hasta que ellos se cansaran o encontrara un lugar en el cual ocultarme. Lo primero que ocurriera.

"El chico de la ventana" (Kookmin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora