Y de repente, ella ( +18)

Viaje inesperado

Estoy al lado de la cama de Kit, lo miro dormir, tiene el rostro relajado, está durmiendo boca arriba y los rizos le caen por la frente. Tiene la boca entrecerrada y respira pausadamente.
Llevamos tres semanas de rollo. Joseph solo ha venido una noche, y porque se puso super pesado. Está enfadado porque le dije que las cosas volverían a ser como antes, y le mentí.
Con Kit me sobra, me gusta hacerlo con él. Es dulce y cariñoso y siempre está dispuesto a satisfacerme por muy cansado que esté.

- ¡ Buenos días dormilón!!! -Le digo mientras acaricio su rostro.

El abre poco a poco los ojos. Me mira y me sonríe y yo me derrito un poco.

-Vamos a desayunar tengo un viaje organizado y me gustaría que vinieras.

- ¿Un viaje?¿ A donde?- me pregunta todavía somnoliento.

- Es una sorpresa. Un cliente me tiene que firmar unos papeles y no quiero ir sola. Me gustaría que vinieras conmigo... ¿ si?

- Bueno, me gustaría remolonear un rato más en la cama, es sábado ....¿ está muy lejos?

- Depende...

- ¿ Depende de que?- me sonríe.

- De si quieres remolonear solo o conmigo. - le digo sonriendo y guiñándole un ojo.

Me abraza y me mete en su cama, empieza a besarme y ya sé que busca... nunca lo hemos hecho aquí... se me hará raro. Pero, a los dos minutos de besarme ya me da igual el cómo me ponga o donde me ponga...

Me hace el amor como siempre me lo hace, haciéndome sentir especial. A veces me llama mi Diosa o algo así, y me hace mucha gracia porque para nada me siento así.
Nos damos una ducha rápida y vamos a desayunar, lo hacemos rápidamente porque no quiero llegar tarde a mi cita y ya salimos con retraso. Si no hay tráfico tardaremos dos horas y media.

Bajamos a la cochera y va directo a mi Audi A1.
Yo me empiezo a reír.

- ¿ A donde vas???- le digo.

- A tu coche, o vamos a ir en otro medio de transporte. - me dice algo confundido.

- No, claro, vamos a ir en mi coche, pero no en ese. -Le digo lanzándole las llaves.

- Ven, está en esta plaza. Vas a conducir tú.

Lo conduzco a mi Range Rover Evoque de color negro.

- Espera! ¿Este coche también es tuyo? Me pregunta sorprendido.

- Si, lo cojo menos, solo para los viajes largos. ¿Y ves esas dos motos, la Triumph y la Ducati?, también son mías, pero ya apenas tengo tiempo de cogerlas.

- En serio.. ¿ las motos también?!!!! Guau!!!! Por mas días que pase contigo no hay ni uno que no me sorprendas preciosa..

Me abraza y va a besarme, yo lo aparto, una cosa es como nos comportemos en la casa y otra muy distinta en la calle..solo es sexo y ahora también amistad..

- Kit, sabes el trato, nada de ...

- Ya, ya lo sé.. nada de cogidos de la mano ni nada por el estilo.. - me dice algo herido.

A veces me da la sensación de que se le olvida la conversación que tuvimos al empezar.

Nos montamos en el coche, y arranca, creo que le gusta el coche. Esta como un niño con un juguete nuevo. Si quisiera se lo podría regalar, pero es muy especial para aceptar cualquier cosa de mi.

- ¿Hacia donde tiro? -Me pregunta saliendo de la cochera.

- Bien coge el norte y tira hacia la A/38.