Aunque la rosa muera ella vivirá en mi corazón, aunque la lluvia acabe ella se quedará en mi memoria, aunque los libros se acaben siempre los recordaré, al igual que a ti; después de que me dejase con los brazos abiertos esperando tu regreso.
Aunque el sol se oculte su bella luz permanecerá conmigo, aunque la brisa de la lluvia se acabe su olor vivirá conmigo.
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Diario de Irina Monroy (segunda parte)
Historia Corta¿Qué puede pasar en la vida de una chica en 365 días?