Dear Lover | Jenlisa

7 | Debo unas disculpas

​Todo había marchado bien hasta que Rosé empezó a gritarme frente a todo el instituto llamándome falsa y otras palabrotas que realmente hacían avergonzarme. Lo que pasó fue que se enteró de que Jason la engañaba porque alguien decidió contárselo aunque nunca supe quien haya sido, y en su discusión con Mary Jean, me incluyeron a mí. Supe que había hecho mal no contárselo, y no contarle lo de la otra noche, pero no podía destruir a Rosé. A pesar de que la amistad se estaba distanciando mucho, la veía realmente feliz con el imbécil de Jason, y no supe decidir aunque mi instinto gritaba que le contara todo. Supongo que fue un gran error de mi parte y con eso me excusaba aunque por dentro me sentía realmente horrible y quería llorar. Por suerte el director Patrick llegó y nos llevó a retención.

Rosé realmente estaba furiosa, y lloraba. Yo no sabía qué hacer para calmarla aunque jamás le dirigí la palabra.

Cuando salimos de retención pensé en disculparme —porque de verdad me sentía culpable— pero ella solo se marchó y no hubo ninguna otra plática entre nosotros. No la hubo en semanas.
No sé qué habrá pasado con Mary Jean y Jason, y tampoco sé si era Mary Jean la del otro día. Pero no los volví a ver juntos.

Notaba siempre que Jason estaba distanciado de ambas, y no existió otro contacto entre él y Rosé, aunque en el fondo sabía que ella aún lo quería. Y me costó superar tras varias desveladas melancólicas, que realmente mi amistad con ella no funcionaría más.

Tengo que entregar muchas tareas y no he tenido tiempo para escribir junto a Lisa al cabo de estas dos semanas. Y tampoco hemos vuelto a hablar del beso de aquella vez ni del dulce vino del restaurante. Y estoy muy segura que sabe que soy su admiradora secreta aunque no haya dicho nada aún.
Dijo que me tenía una sorpresa. Estoy ansiosa por eso.