Marvel • one shots

9. Pietro maximoff II

Party II
Advertencia: smut

Luego de unas largas tres horas con Natasha y Wanda alrededor de Kalissa, un maquillaje ahumado oscuro con unos labios color vino y un vestido pegado al cuerpo color negro completaban el look junto a unos zapatos de tacón del mismo color.

Se sentía sexy, hermosa y como toda una mujer adulta. Sonríe segura al ver su reflejo y espera a que sus amigas terminaran de arreglarse. Al ser tan expertas en eso, en menos de treinta minutos caminaron hacia el salón de fiestas del complejo, donde comenzaron a saludar a los que conocían mientras que Kalissa sonreía y agradecía ante todos los que se acercaban a felicitarla por el éxito de su misión.

Camina hacia el bar y pide un gin tonic al barman cuando alguien toca su hombro, al voltearse se encuentra a Pietro vistiendo completamente de negro con su cabello platinado bastante despeinado, como usualmente. Sus mangas arremangadas dejaban a la vista sus brazos bastante trabajados. Le regala una sonrisa a la muchacha mientras la visualiza de arriba a abajo.

-Kalissa, te vez hermosísima esta noche -sonríe dejando a notar aquel hermoso acento y ella le devuelve el gesto besando su mejilla.

-Tú no te vez mal, Maximoff -responde recibiendo su vaso y dándole un trago. La fiesta estaba en su auge y ella reía al ver a la gente bailar como locos en la pista.

-¿Así que ya te arrepientes de permitir esta fiesta? -pregunta burlón sentándose a su lado tomando de su cerveza. Ella niega risueña.

-No, no tanto. Aún es temprano, ¿qué podría salir mal? -pregunta.

El joven se veía algo desanimado y eso le preocupó a la joven.

-¿Todo en orden, Piet? -pregunta tomando su mano, el entrelaza sus dedos con los de ellas y hace una mueca.

-Corté con mi novia.. ella, estaba celosa de tí -dice y Kalissa lo mira con los ojos abiertos.

-¿Qué? ¿Por qué? -pregunta prestando toda su atención en el muchacho.

-Dijo que hablaba demasiado de tí y.. me molesté porque te insultó. Fue algo más bien consensuado entre ambos -dice y ríe sin gracia.

-Lo siento tanto, Pietro. Realmente lo hago -dice algo angustiada. Sabía que el joven quería a aquella chica.

-Hey, hey Kal no es tu culpa para nada. Ella quiso hacerlo así y debo aceptarlo. No quiero obligar a nadie a estar conmigo -dice y toma un trago de su cerveza, terminándola.

-Cualquier mujer sería afortunada de tenerte a su lado. -le dice y él le sonríe para luego dejar un beso en su mejilla.

-¿Qué dices de una ronda de chupitos? -sonríe ella. Sabía que era una mala idea pero haría lo que sea por levantar sus ánimos.

Luego de dos horas hablando y riendo con chupitos, cervezas y vasos de gin tonic en medio, ambos jóvenes caminan hacia la pista comenzando a mezclarse entre la gente y bailando al ritmo de la música, bastante pegados uno al otro y riendo de cada tontería que realizaban sus cuerpos ebrios, deben darse una idea de la cantidad de alcohol que él ingirió para que le hiciera realmente efecto, mientras que Kalissa había querico "controlarse" fallando en el intento.

Las luces bajas y el alcohol en su sangre los deshinibió a niveles altísimos, tantos que el cuerpo de Kalissa se encontraba frente al de Pietro bailando con su espalda pegada a su fornido pecho, mientras que las manos del Sokoviano descansaban en sus caderas.