Te odié hasta desearte

Capítulo 21

Cogemos un taxi, cuando nos montamos no le dirijo la palabra ni siquiera lo miro, solo miro por la ventana hasta llegar a mí casa.

— Buenas noches Jess -besa mi mejilla-

Lo miro, sé que tengo que bajarme del taxi pero no lo hago, me quedo mirándolo, después de lo que ha pasado no me apetece estar sola en casa y sigo enfadada con él aunque solo sea un poco, pero ese gesto de besar mi mejilla ha conseguido ablandarme un poco, no quiero que se vaya para su casa ahora, no quiero subir sola ni estar sola en casa en estos momentos.

— Sube conmigo, no quiero estar sola -suspiro-

James asiente con la cabeza y paga al taxista, sabe que sigo enfadada con él y entiende que no quiera estar sola, así que no me dice nada al respecto, no menciona mi enfado. Subimos a mi casa y entramos, me dirijo hacia el baño, pongo el tapón en la bañera y abro el grifo para que se llene, tengo unas ganas tremendas de darme una buena ducha.

— ¿ Vas a bañarte ahora? -dice apoyado en el marco de la puerta-

— Sí..- digo mirando como se llena la bañera- todavía siento las repugnantes manos de ese hombre recorriendo mi cuerpo -me tapo la cara con las manos-

James se acerca a mí y me aparta las manos de la cara, me acaricia la mejilla mirándome con dulzura, y me abraza con fuerza.

— Losiento Jess..siento no haber estado contigo..

En su voz puedo notar la sinceridad con la que lo dice y se que de verdad lo siente, que se arrepiente de verdad, así que lo beso y cuando separo mis labios de los suyos asiento con la cabeza, acepto sus disculpas, sé que son sinceras y que lo siente de verdad y no voy a martirizarlo más.

— Bájame la cremallera de vestido - digo dándome la vuelta-

Acaricia mi espalda y eso me produce un escalofrío, baja la cremallera del vestido y me besa el hombro.

— Estaré en él salón esperandote -susurra en mí oído-

Lo agarro del brazo y niego con la cabeza, no quiero que se vaya, quiero que se quede y me da igual que me vea sin ropa, no sé lo que somos aún pero sé que lo quiero y no tengo pensado acostarme con él aún, tengo muchas ganas de estar con él y de que me haga suya,deseo más que nada estar con él,quiero que me toque como sólo él sabe hacerlo y quiero sentirlo pero aún no, ahora lo que quiero es que esté conmigo y que se bañe conmigo.

— Báñate conmigo -susurro en sus labios-

— ¿Estás segura? -sonríe-

— Sí -sonrío y dejo caer mi vestido al suelo, dejando ver mi ropa interior de encaje, el me mira de arriba a abajo y sonríe-

Me recojo el pelo en un moño y me quito la ropa interior y me meto en la bañera mientras que James se desviste,lo observo mientras se quita la ropa y no puedo evitar morderme el labio, se quita la camisa dejando ver sus marcados abdominales, seguidamente se quita los pantalones, antes de quitarse los boxers me mira y sonríe, se los quita y entra en la bañera, se sienta justo en frente de mí.

— ¿Es necesario que estés tan lejos? -enarca una ceja y ríe-

— Sí, lo es -río- no voy a acostarme contigo, almenos no de momento ni siquiera sé que somos..

— Lo sé -ríe- pues somos dos personas que se quieren.

— Siempre sabes que decir -sonrío-

— No siempre pero si casi siempre -sonríe-

Me acerco a él, me coloco entre sus piernas y pongo mi espalda en su pecho, noto su cuerpo contra el mío y mi respiración se acelera, el besa mi cuello y después mi hombro mientras que sus manos me acarician suavemente los brazos y bajan acariciando mis caderas y mis piernas,el tacto de sus manos en mi piel es suave, un escalofrío recorre mi cuerpo cada vez que me toca y siento millones de mariposas en mi estómago, ladeo la cabeza y lo beso, cuando mis labios tocan los suyos mi respiración se acelera aún más, es un beso dulce y a la vez apasionado, mi mano baja desde su cuello a su pecho acariciándolo suavemente hasta llegar a su abdomen, se separa suavemente de mis labios y sonríe, noto su respiración acelerada contra mis labios y no puedo evitar sonreír.

— Dame la esponja -dice-

Asiento con la cabeza, cojo la esponja y le hecho gel, después se la doy, el comienza frotando mi espalda y mis brazos suavemente, después mi estómago y mis piernas.

— James..

— Dime -besa mi cuello-

— ¿Qué es lo que sabes de mi hermano que no me cuentas?

Me mira extrañado, sé que esa pregunta lo acaba de pillar por sorpresa y que no se lo esperaba, se queda pensando unos segundos antes de responder.

— ¿Estabas en la azotea está noche cuando hablaba con tú hermano verdad?

— No has respondido a mi pregunta -digo evadiendo su pregunta, sé que me ha pillado, que sabe que estaba allí aunque necesite que se lo confirme para estar seguro-

— No puedo contartelo, es cosa suya y debe hacerlo él -suspira-

— ¿No confías en mí?

— Claro que confío joder pero..

— ¿Pero qué James? Es mi hermano, no soy uno de vuestros amigos que va a ir contando por ahí lo que quiera que sea que estéis ocultando.

— Lo sé -suspira- no es nada malo, no está metido en nada tampoco, pero está bien te lo contaré, pero cuando él te lo cuente más te vale hacerte bien la sorprendida -ríe-

— Lo haré -río y lo beso-