Te odié hasta desearte

Capítulo 24

Desabrocho sus pantalones pero James coge mi mano y me detiene.

— ¿Estás segura de esto?

— Sí –lo beso–

Estoy totalmente segura ya no tengo dudas, tengo muy claro que quiero hacer esto con él y no voy a detenerme. James se levanta del sofá conmigo aún encima y me lleva hasta mi habitación, cierra la puerta y me tumba en la cama, se tumba encima de mí sin dejar peso y me besa, me quita la camiseta, se queda mirandonme por un momento sonriendo y deja un rastro de besos desde mi abdomen hasta mis pechos, me quita el sujetador, besa mis pechos y un pequeño gemido se escapa de mis labios lo que hace que James sonría,termina de desnudarme, su boca se posa sobre mi intimidad,su lengua se mueve de arriba a abajo con rapidez, es una sensación agradable que no había sentido nunca, arqueo la espalda y mis manos se agarran con fuerza a las sábanas y gimo fuerte, James vuelve a subir hasta mi labios para besarme apasionadamente, sus manos recorren mi cuerpo mientras me besa. Le bajo los boxers y agarro su miembro, su erección es bastante notable, él suelta un gruñido cuando mi mano comienza a moverse de arriba a abajo sobre su miembro, sus músculos se tensan y gime, me detengo y lo miro.

— No puedes correrte aún –susurro de forma traviesa y muerdo su labio–

— Para ser tu primera vez te manejas muy bien mi chica traviesa –ríe y besa mi cuello–

Se levanta y coge sus pantalones del suelo, saca la cartera y coge un condón, vuelve a la cama conmigo, se lo quito de las manos y se lo pongo yo, muerdo su labio y asiento con la cabeza, se coloca sobre mí sin dejar peso y agarra mi mano.

— Avísame si te hago daño ¿de acuerdo? –acaricia mi mejilla–

— Sí –lo beso– estaré bien

Me besa y entra dentro de mí despacio, noto una sensación de dolor que poco a poco se va disipando a medida que James continúa, no para de besarme, yo gimo cada vez más fuerte, clavo las uñas en su espalda y le muerdo el labio, lo rodeo con mis piernas, James aumenta la intensidad, me embiste más fuerte lo que me hace gemir más, la sensación de placer aumenta al punto de llegar a la cumbre, ambos llegamos al orgasmo y gemimos alto.
James se tumba boca arriba y yo pongo la cabeza en su pecho acurrucandome a su lado, nuestra respiración es agitada, ambos estamos exahustos.

— Ha sido increíble –besa mi frente– ¿te ha dolido?

— No me ha dolido tanto como pensaba , era soportable –río– ¿lo has hecho con muchas mujeres?

— Bueno..algunas, pero no sentía por ellas lo que siento por ti Jess.. empiezo a asustarme –me mira preocupado–

— ¿Por qué empiezas a asustarte? –acaricio su pecho–

— Estoy sintiendo por ti cosas que no he sentido jamás por nadie y tengo miedo a que me dejes, a qué te marches..

— No voy a dejarte –dejo un suave beso sobre sus labios– te quiero demasiado..

— Espero que no.. –me abraza y sonrío–

La puerta de mi habitación se abre y rápidamente me tapo, logro ver a mi padre que vuelve a cerrar la puerta rápido, nos ha pillado y solo espero que no esté enfadado porque hemos hecho esto en casa, debí de haber cerrado la puerta de mi habitación.

— Jess sal un momento esto es importante.

— ¡Voy! –grito vistiendome rápidamente–