Capítulo 25: All I want for Christmas

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Regresaron a sus vidas habituales, Clarke a sus clases en el Instituto, Lexa a sus consultas médicas y Raven a su misión con la Inspectora Rivers y el ahora llamado "caso Azgeda"

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Regresaron a sus vidas habituales, Clarke a sus clases en el Instituto, Lexa a sus consultas médicas y Raven a su misión con la Inspectora Rivers y el ahora llamado "caso Azgeda".

Clarke y Lexa quedaron en seguir su romance como lo pactaron, despacio, dándose espacio y tiempos. Faltaban dos semanas para la operación que podría devolver a Clarke su visión, algo que llenaba de alegría y nervios al mismo tiempo a la artista. Lexa por su parte tenía muchas expectativas, ella sabía casi con certeza que su hermoso Ángel volvería a ver y eso era su mayor deseo, casi como nunca a lo largo de su carrera, pero era consciente de que el caso Griffin no era un caso más en su exitosa carrera, devolverle la vista a su dulce Clarke significaba todo.

Pero Lexa tenía diferentes asuntos girando en su cabeza, fuera de que Clarke fuera el centro de todas sus prioridades, el centro de su existencia en esos momentos. Estaba feliz de haber visto a su hermana tan enamorada como jamás lo hubiera soñado, y estaba feliz por la buena elección que había hecho, ya que Niylah era sin dudas una mujer extraordinaria, y muy a la par de la vida de Alicia. Solo deseaba que la modelo no cambiara su decisión en un tiempo, sabía que la gemela a veces se obsecionaba con algo por un período de tiempo y luego cambiaba, y aunque esto fuera algo muy muy diferente, no podía dejar de sentir un leve temor.

Al volver a su consultorio el martes y contarle brevemente a su fiel secretaria Echo todo lo ocurrido en el loco fin de semana en Hawaii, repasó la lista de pacientes que debería atender ese día encontrándose con la sorpresa de que Carl Fish era uno de esos pacientes, y por lógica probablemente vendría con su madre a la consulta.

De inmediato Lexa comenzó a pensar ¿qué demonios hacer? Casi con certeza había descubierto que Echo y Ontari eran hermanas, las que desgraciadamente habían sido separadas de niñas, y que jamás habían dejado de buscarse. Le alegraba mucho saber que podría reunirlas de nuevo, pero existía el complejo problema de la profesión o trabajo que poseía Ontari momentáneamente. Lexa sabía que ella no podía tomar esa decisión por su antigua amante, eso era algo que sólo Ontari podía decidir, si deseaba reencontrarse con su hermana perdida, y qué le diría al respecto de cómo se ganaba la vida.

Sin dudarlo un segundo más, Lexa le pidió a Echo que reubicara algunas de sus primeras citas de la mañana, ya que debía asistir a un compromiso urgente, que le llevaría un par de horas. Dejando la clínica y a su secretaria de inmediato. Echo se sorprendió bastante de la repentina reunión de su jefa, pero sabía que a veces la doctora Woods le costaba seguir sus agetreados compromisos diarios.

Lexa llegó al departamento en pocos minutos, en el viaje hacia el mismo ya le había enviado un mensaje de texto a Ontari avisándole de su inesperada visita, ya que necesitaba hablar un asunto con ella en privado. La mujer accedió sin problemas a que se acercara a su departamento.

Cuando Lexa llegó al mismo, Ontari no tardó en abrirle la puerta, se encontraba sola, y se veía mucho mejor de sus golpes en el rostro. Lexa entró al departamento algo nerviosa y Ontari percibió sus inseguridades de inmediato, haciéndola dudar de qué demonios estaba ocurriendo ahora, esperando que no tubiera que ver con su pequeño hijo.

Angel de Luz [Completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora