Capítulo 3 Vuelta a la vida

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Desde la última noche no había tenido más sueños, o visiones como yo las llamaba, tampoco había dormido en esas noches, el médico había traído las pruebas dos días después de mi última visión, seguía teniendo un doble funcionamiento en mi cerebro y mi corazón se había echo mucho más grande tenía apenas cuarenta pulsaciones por minuto, lo único que saque en claro es que estaba bien físicamente, pero no mentalmente.

Ese día estaba feliz porque me iban a dar el alta después de una semana y media más aburrido que una ostra, cabe decir que mi temperatura había ascendido a unos impresionantes cuarenta y cinco grados, me sentí orgulloso ya que en esos días gane un record de el hombre más caliente vivo del mundo, vinieron a hacerme unas fotos un hombre calvo con una cara muy extraña, me hizo gracia lo de vivo, no sé que se esperaban, ¿ponerle un record a un niño muerto? En todo caso en ese día estaba eufórico y muy activo lo que no me gustaba es que tenía que ir a clase y ya había perdido casi dos semanas lo bueno es que era jueves y no iba a ir a clase el viernes.

El médico vino a quitarme el suero y a darme la mano para despedirse de mí, al fin y al cabo me había caído muy bien, me vestí como pude, rápido y bien y mi padre quiso llevarme en silla de ruedas pero no lo consiguió, fui andando a la puerta del hospital solo y allí mi padre me señalo donde estaba el coche, estaba un tanto lejos pero no iba a esperar a que mi padre me cogiera en brazos y me llevara, así que fui a paso firme  para el coche, el sol me daba en la cara, era una gran sensación muy similar a la de mi visión. Lo único que quería hacer era ir con mis amigos y claro esta saludar a mi familia que vino a visitarme un par de veces por semana, al montarme en el coche lo recordaba menos incomodo de lo normal pero todo lo solucionaba la música que echaban en la radio, mientras miraba la venta estuve pensando en aquella voz que grataba seguía forcejeando para sacar ese nombre pero no lo conseguía, no quería estar molesto por eso así que intente dejar de pensar sin éxito, ya que tengo un cerebro que le gusta joderme a todas horas, todavía no me explicaron el porqué de mi cerebro, solo decían que tendría que tener el doble de capacidad ahora, ni que fuera un disco duro o algo, yo no era muy inteligente pero tampoco era tonto sacaba notas medias en los exámenes suficientes como para aprobar pero otras veces le decía cosas al profesor que lo dejaba con la boca abierta , cosas que ni el entendía, pero bueno los resultados los dan en las notas no lo digo yo, por desgracia, a todo esto llegamos a la casa de mi abuela, ya habían quitado las cosas de navidad, lo que era un fastidio porque siempre había chocolate, pero era Febrero y ya era hora de quitarlo, nos quedamos a comer hay, me hicieron las mismas preguntas de siempre que si estaba bien que como estaba etc.

La comida parecía muy buena pero no tenía hambre ya llevaba creo que cinco o cuatro días sin comer nada y tampoco tenía la necesidad.

Al terminar de comer me llego un mensaje de un grupo de mis amigos diciendo de salir el Sábado para celebrar mi vuelta, yo obviamente dije que iría sin falta, ya que lo hacen por mí, de camino a casa todo fue normal lo único que se escuchaba en el coche era la radio éramos en el coche cuatro mi hermano Alejandro mi madre mi padre que conducía y yo, mi hermana ya no estaba ya que se había ido de vuelta a Málaga, por si nadie lo sabía yo vivía en Melilla y en el extremo más lejano de la civilización, aunque no hay mal que por bien no venga, al estar tan lejos la contaminación lumínica no afecta tanto por lo que se puede sacar el telescopio y ojear el cielo, al llegar a casa todo estaba en su sitio, los gatos estaban esperando en la entrada de la casa, uno de ellos estaba resfriado pero los demás estaban bien, tampoco había pasado tanto tiempo pero es lo que tiene la nostalgia, olía a bizcocho, parece que mi hermana se había hecho de las suyas antes de irse, lo primero que hice fue subir a mi cuarto y dejar las cosas después me senté en el sillón del salón y me quedé hay sentado sin encender la tele solo mirando mi reflejo en ella, el médico me había comentado que hiciera ejercicio, así que cogí me puse unos pantalones de deporte y me puse a correr en una cinta que nos regaló el marido de mi Tía, por fin serviría de algo ya que nadie de la casa lo una, puse un kilómetro para correr, antes cuando lo usaba no llegaba ni a un quilómetro no estaba gordo estaba en forma visualmente pero tenía ese defecto.

Me puse a correr primero empecé lento pero me puse a tocar botones para animar un poco el ritmo, la cinta lo estaba dando todo y yo no me cansaba ni nada e incluso podía ir más rápido que la cinta, ese quilómetro lo hice en unos seis minutos, me pareció mucho pero la cinta no podía ir a más velocidad, salí de la cinta de un salto y no me sentía cansado es más no había ni sudado, al entrar por la puerta mi madre me regaño porque estaba corriendo muy fuerte y podría ser malo para mí, pero yo le di la razón sin pensármelo dos veces y le dije que me iba a dar una ducha.

El viernes todo fue normal no pegue ojo en toda la noche y no comí nada, mis padres ya se estaban empezando a preocupar pero yo les decía que estaba estupendamente antes de que me dijeran nada, no salí de la casa estuve por la mañana haciendo toda la tarea atrasada, la termine muy rápido, aunque tampoco había mucho para haber faltado dos semanas, y el resto del día estuve chateando con mis amigos mientras jugaba a la videoconsola.

Mientras que el Sábado por la mañana todo fue tranquilo pero por la tarde al quedar con mis amigos se fue alocando, unos querían ir al puerto otros a una discotecas otros chillaban “barcos y bitches”, supongo que lo decía de broma, y uno dijo en voz alta que eligiera yo que era mi día, y todos me miraron y me sentí incómodo dije de ir al parque forestal que construyeron en Melilla hace apenas uno meses y les pareció una gran idea ya que la mayoría no había ido aun, éramos más o menos veinte personas andando por la calle en una acera realmente pequeña, no íbamos llamando la atención, o por lo menos no mucho, a mí me gustaba pasar desapercibido, pero por un día no pasaría nada.

Al llegar allí todo era muy bonito y vacío  lo hicieron muy bien, llegamos a un parque donde algunas personas de mi grupo se metieron dentro para hacerse fotos, me dijeron de hacerme una pero yo lo negué con la cabeza e intentaron cogerme entre tres y en el aire me hicieron una foto, no soy muy fotogénico pero Salí muy bien en esa foto pero igualmente me queje porque por poco me caigo, nos fuimos a una especie de lago artificial muy grande con una fuente en medio que no estaba funcionando en ese momento, no dimos una vuelta por los alrededores no había gran cosa pero todo estaba muy bien echo para salir con la familia y pasar un buen rato. Nos fuimos a cenar a la playa, donde nos pegamos otra caminata para llegar al Burger King donde me pedí una Long Chiken, Coca-Cola y unas alitas de pollo, lo de siempre y todo fue genial aquel día.

Al día siguiente me conecte al ordenador, ya por desgracia era Sábado y tenía que ir al instituto al día siguiente pero realmente quería volver, estuve ablando con mis amigos y me pasaron unas fotos donde salía yo, no savia que me estaban haciendo esas fotos así que me cabree con ellos o por lo menos con el que me hizo la foto, pero no contesto, no salí en todo el día solo estuve corriendo en la cinta donde en vez de poner un kilómetro me puse diez y lo hice sin problemas a máxima velocidad, mis padres no lo saben y quiero que siga siendo así, pero me sentí muy orgulloso de mi mismo, llevaba muchos días sin comer ni beber y sin dormir y apenas había sudado.

Ya era por la noche y eran cerca de las once, yo esperaba que volviese a ocurrir lo de las visiones ya que me aburría y así el tiempo pasaría más rápido pero el tiempo pasaba y no sentía nada ya habían pasado más de las once así que me quite el reloj lo deje sobre la mesa e intente pegar ojo, sin éxito, por lo que entonces me esperaba una larga noche en vela.

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