Capítulo Trece

5.2K 901 275
                                    

Cuando terminó el partido todos fueron a celebrar con los jugadores, justo como habían hecho con los de fútbol, para suerte de todos, baloncesto también había ganado

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Cuando terminó el partido todos fueron a celebrar con los jugadores, justo como habían hecho con los de fútbol, para suerte de todos, baloncesto también había ganado.

Yoongi saludó algunos de los que se les acercaba, esperando encontrarse con su sol quién parecía estar con sus amigos esperando a alguien.

—Yoongi vamos a celebrar esto en casa —habló Jin sonriendo —. Mamá dijo que haría algo especial si ganábamos, ya le he comentado y quiere saber los detalles.

—Esta bien —asintió de acuerdo.

Todos comenzaron a caminar fuera de la escuela, esperando a alguien, bueno a algunos. Yoongi había aprovechado aquel tiempo para marcarle a sus padres y avisarles que iría a comer con sus amigos en casa de Jin lo cual no les pareció ningún problema.

Después de eso observó a sus dos amigos, preguntándose por qué Namjoon tardaba tanto en volver.

— ¿Y sí mejor vamos por él? —propuso Yoongi moviendo su pie de un lado a otro, ansioso.

—Tranquilo Yoongi, él invitó a Jeon a venir con nosotros —habló Taehyung sonriendo —. Al parecer ellos dos se traen algo, ¿no sabes nada?

Yoongi se encogió de hombros.

Él no había hecho gran cosa; solo los había presentado y dejado solos después de hacer aquello. Al parecer habían tomado bastante confianza ya que hablaban cada que podían y tenían tiempo.

—Ya viene. Oh trajo a alguien más —Jin codeo a Yoongi para que viera quién se acercaba a ellos.

Yoongi abrió los ojos cuando observó a Hoseok dirigiéndose donde todos ellos con una sonrisa incómoda, Jimin hablaba de cosas sin importancia con Namjoon y Jungkook.

Finalmente cuando llegaron donde ellos, rápidamente Taehyung dio el primer paso para caminar a la casa de su novio, los demás siguiéndole el paso, hablando entre todos.

Yoongi observaba de reojo a Hoseok quien hablaba con Jin sobre algunas cosas que no le parecían interesantes, todo parecía tan tranquilo, incluso, bastante bueno.

—Cuidado —Yoongi tropezó con agujero que había en la banqueta, observó su brazo donde una mano lo sostenía —. Deberías tener más cuidado —Hoseok le sonrió avergonzado para alejar su mano.

—Gracias —susurró cuando lo vio seguir caminando delante de él.

A su lado se encontraba Jimin quien soltó un suspiro: —Si quieres que las cosas sean como antes deberías comenzar con hablarle —Yoongi se cruzó de brazos —. Recuerdo que ustedes eran inseparables.

—Lo éramos —confirmó Yoongi —. Pero ya no. Yo lo eché a perder todo.

—Lo sé —asintió de acuerdo Jimin —. Pero aún tienes la oportunidad de arreglarlo; Hoseok está dispuesto a recuperar todo aquello —Yoongi miró al suelo —. Podrías poner de tu parte si quieres también recuperar algo.

Con esas palabras se alejó de ahí para seguir a los demás con pasos apresurados. Yoongi siguió a Hoseok, recordando aquellos días en los que eran niños. Su corazón dolió.

Comenzó a caminar hacia él, decidido a comenzar con aquella amistad de años, no quería terminarla ahora, no ahora que tenía la oportunidad de arreglarlo todo.

— ¡Yoongi! —sintió un peso en su estómago cuando volteó a su izquierda, observando el rostro de su madre detrás del cristal del auto —. ¿Qué haces aquí hijo? ¿No ibas a casa de Jin?

—Ah... Sí, ellos están allá —señaló donde se encontraban todos observándolo, esperando a que vaya con ellos —. ¿Si ves mamá?

—Sí... Oh... Yoongi, ¿qué no es...? —Yoongi siguió la mirada de su madre, tragando en seco al descubrí a quién se dirigía —. Yoongi sube al auto. Ahora —el mencionado frunció el ceño.

— ¿Por qué?

—Sube. Ahora —Yoongi mordió su labio, dudando.

Su madre le miró, molesta. Yoongi gritó a sus amigos que no podría ir, subiendo al auto sin agregar algo más. Su madre no le había dirigido la palabra, manteniéndose seria en todo el trayecto a casa.

Cuando llegaron fue la primera en bajar, Yoongi lo hizo minutos después, entrando a casa y encontrándose con la mirada seria de su padre sobre él.

— ¿Es cierto? —su padre se acercó lo suficiente para intimidarlo —. ¿Aquel bastardo estaba contigo? —escupió con asco aquellas palabras, el corazón de Yoongi comenzó a doler —. Contesta, mierda. ¿Esa cosa se encontraba contigo? ¿Cómo es posible que no lo hayas mencionado?

—No creí que fuera importante —respondió, intentando sonar indiferente.

—Lo es Yoongi. Volvió, significa que sólo traerá problemas —su madre se encontraba mirando el panorama, molesta al igual que su esposo —. Te cambiaremos de escuela.

— ¿Qué? No, ¿por qué? —Yoongi sintió realmente miedo, no quería que lo alejaran de Hoseok, no ahora —. Por Dios ha pasado años, da igual —su padre se acercó furioso, alzando la mano —. ¿Por qué vas a golpearme?

— ¿Por qué lo defiendes?

—Era mi amigo —respondió fruncido el ceño —. Él ni siquiera sabe quién soy. Perdió la memoria en el accidente.

— ¿Accidente? —su madre pareció reaccionar —. Oh, es cierto, el accidente... —susurró lo bastante bajo, dando una mirada a su esposo, sin embargo Yoongi logró escucharla.

— ¿Sabían sobre eso y nunca me lo dijeron? —Yoongi apretó los puños, bastante molesto por lo que estaba escuchando.

—No era como si nos interesara y menos a ti —respondió con simpleza su padre —. Si no te recuerda está bien; pero no te juntes con él. Estoy seguro que debe seguir con aquellas ideas asquerosas, las personas no cambian —con eso su padre se fue de ahí.

Su madre también se fue a la cocina, dejándolo solo en el pasillo que separa la sala y la cocina. Subió las escaleras confundido y molesto, miró a la ventana, esperando que de ella también apareciera Hoseok, como antes, sin embargo solo podía observar el cuarto vacío de sus vecinos.

—Todo esto es una mierda —se lamentó Yoongi, soltando algunas lágrimas —. ¿Por qué tenemos que sufrir tanto para ser felices? —miró está vez al cielo —. Solo quiero que mis padres comprendan que si me gustan los chicos no debe ser nada malo, que no está mal...

Su hermano entró a la habitación una hora después para encontrar a Yoongi durmiendo en su cama, observó bien su rostro para darse cuenta que había estado llorando y que no se había bañado.

—Oh Yoongi —una mirada triste —. Todo estará bien, ya lo verás —susurró acariciando su cabello —. Pronto entenderán... Espero que sí.

Amor De Niños /Yoonseok/ TERMINADA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora