Fugaz XIV - A la vuelta de la esquina

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Como te hacen falta mis palabras en papel.

Ahora entiendo que las quieres

para que te acaricien el alma,

que no siempre mis besos logran alcanzarla

aunque te agarre de espaldas

y te bese los rincones.

Las quieres para sentir mimos en el pelo

y más días buenos a la vuelta de la esquina.


Me gustan las tardes como hoy

con humildes viajes en bus

porque te miro de reojo derramando amor por ti

y nadie puede notarlo (a veces ni tú)

cuando eso pasa todo lo siento a flor de piel,

se me hace un nudo en la garganta

y me aguanto las ganas de todo.


Como me gusta saber que ando

por ahí en tus pensamientos,

que de vez en cuando

te desconcentra algún recuerdo,

se te eriza la piel y te muerdes los labios.

Que lo único que quieres al salir de casa es

regresar por donde te fuiste

y acurrucarte en mi pecho.


Tengo la necesidad de cumplirte los deseos,

de arrancarte los suspiros y la ropa,

de decirte cada mañana lo hermosa que te ves

con los rizos al viento y los ojos de negro

llevando la vida a la ligera entre tu sonrisa.


Pienso y siento que nunca serán suficientes

las horas para estar contigo y a tu lado,

ni tan siquiera bastarán mis próximas tres vidas

para cumplir todo lo que deseo vivir de tu mano.


No alcanzarán los días para enredarme en tu pelo

y conocerte mejor a punta de miradas y canciones.

Ni las noches con mis manos aferradas a tu espalda, 

ni tus sutiles besos en mi hombro.

Todas las caricias se me antojan eternas si nacen

en tu boca y terminan en mi piel y viceversa.


Te escribo

porque fuiste,

eres  y sé

que seguirás

siendo mi sueño.

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