Fugaz XX - Entre los volados del vestido

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Andas con ganas...

de ser musa,

si supieras...

si tan solo supieras

que ya lo eres.

Que no necesitas una mano

recorriendo tu espalda

desnudándote el alma

prenda a prenda,

beso a beso

para que escriba en tu nombre

porque en la pista de baile

paso a paso

y mirada a mirada

te desnudas y cuentas tu historia...

Que te ves preciosa

con el cabello al viento

dando vueltas al ritmo de salsa,

y el sabor del merengue

te aviva el alma

que te enciende el pecho,

que al verte como diosa

al humedecerte los labios,

en aquel vestido rojo

nadie nota el sudor de tu frente.

El universo sabe que el tango

te robó el corazón.

Debes entender

que hay caderas que hipnotizan,

y sonrisas que atrapan

y algunas miradas que

encienden los infiernos,

como las tuyas, por ejemplo.

Que los guiños de ojo

pueden ser cómplices aventureros

y provocadores de lo incierto.

Que las manos andan sueltas

porque deben pero...

se resisten a posarse

en tu cintura sutilmente

para querer abandonarse allí.

No es solo la delicadeza

con la que te mueves

y brotan versos por el universo

sino la ligereza

con la que tomas el tiempo

entre los volados del vestido

y el espacio

entre la suela de los zapatos

para transformarlo en arte.



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