Capítulo 3: La fiesta escolar

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Han pasado dos semanas desde que empezaron las clases, eran las cuatro de la madrugada y yo me desperté sudando, salí de mi habitación aún con la pijama puesta, pues las clases comenzaban a las seis de la mañana y bajé a tomar agua en los bebederos que quedaban en planta baja; mientras tomaba agua, vi una silueta negra, la cual no pude detallar mucho al momento, poco a poco tomaba forma y se empezaba a parecer a mí, poco después, se fue corriendo, yo lo perseguí para ver quién era, pero al cruzar por el pasillo hacia las escaleras la figura había desaparecido, la busqué por bastante tiempo.

Al rato, me encontraba corriendo por el segundo piso del edificio de los dormitorios, buscaba a esa silueta, no podía ser idea mía, de repente veo que la puerta numero 41 se abre y una pelirroja sale de aquella habitación, traté de frenar pero terminé estrellándome con aquella chica, ella cayó boca arriba y yo caí con mi cara en su pecho, algo aturdido levanté la mirada y vi quien era la chica, era Mindy aún con su pijama puesta, supongo que iría por algo de beber, al ver su cara, vi que estaba sonrojada a la vez que enojada, supongo que porque estaba demasiado cerca de su pecho, yo me levanté rápidamente y me puse de pie, le dije con tono frío:

-¿Qué haces a esta hora despierta?-

-No estaba corriendo por los pasillos como un desquiciado, ¡ayúdame a levantarme!- tras ella decir esto, le extendí mi mano y ella la tomó para ponerse de pie, tras esto, me di cuenta que bajo su bata blanca, ella no estaba usando sostén, tal parece, duerme de esa manera, simplemente fue un detalle que ignoré, le solté la mano y seguí caminando, una vez que estuve de espaldas hacia ella, me dijo:

-¿Por qué corres por los pasillos?-

Me detuve y le dije:

-No es asunto tuyo, ve a dormir Yler...- tras esto me fui y subí a mi habitación, solo me preguntaba ¿Qué era esa cosa?

Debía cambiarme la ropa pues a las 9am tenía que ayudar a adornar la escuela para la fiesta de bienvenida, entré a la ducha y me di un baño, el agua era caliente, la verdad los baños fríos no me gustan así que no me hubiera gustado la temperatura de otra manera, el shampoo que me habían dado junto con todo lo que había en la habitación, olía bastante bien, como poco me corto el pelo, ya lo tenía bastante largo, llegándome a tapar los ojos y rozarme la punta de la nariz. Estuve en el baño por casi media hora disfrutando el calor de la ducha, al salir de allí y ver el espejo, este estaba empañado, me acerqué a limpiarlo un poco pues me iba a peinar, al hacer esto, noto a la misma figura negra con una capucha puesta y una sonrisa macabra, quien estaba justo atrás de mí, me asusté y rápidamente me volteé a ver, pero no había nada, solo dije para mí mismo:

-Me estoy volviendo realmente loco-

Salí del baño peinado, me vestí y alisté, me puse la chamarra roja que me había comprado hace algunas semanas, se había convertido en la prenda que más uso, fui al patio central del colegio, justo en frente del edificio de los dormitorios, llevaba puesto además de la chamarra roja, una camisa de color rojo, un pantalón beige y unos zapatos negros sin cordones, al llegar al sitio y ver mi entorno me percaté de que habían otros allí, todos vestían ropa de color pues hoy era nuestro día libre de clases, entre los que estaban en el sitio, estaba Javier, él tenía una camisa de color verde claro con mangas largas, un pantalón azul claro y unas botas de color azul oscuro, era un conjunto de ropa que lo hacía resaltar entre todos, me acerqué a él y le pregunté:

-Llegas temprano ¿eh?-

-Más rápido que tú, llegué hace diez minutos- me dijo con una sonrisa de oreja a oreja, luego su expresión cambió a una más seria y distante, tras hacerlo me preguntó:

-¿Haz notado a una sombra que ronda por los pasillos?-

-¿También la viste?- Pregunté con asombro -Si, si la vi, incluso se infiltró a mi baño- le dije mirando hacia otro lado, él me dijo:

-Le pregunté a Luminios sobre él, pero no me dijo nada, crees que sea de los de...-

Antes que terminara apareció una maestra y dijo:

-¿Qué hacen todos parados? La fiesta es a las cuatro de la tarde y ustedes no han empezado, ¡Muévanse!-

-Hablamos luego- le dije a Javier antes de irme a ayudar a mis compañeros, quizás no completó lo que ida a decir, pero concuerdo, sea lo que sea esa cosa, pertenece al ejército de Darko.

Fue un día atareado, pero para las 2 de la tarde, ya habíamos terminado, me fui a mi cuarto, me recosté sobre mi cama, miré hacia la derecha, donde estaba el armario, la máscara que Luminios me dio colgaba de un ganchillo en el armario, me levanté y fui hacia ella, la tomé y la puse en un pequeño bolso, el cual me llevaría a la fiesta, además de meter un poco de dinero en efectivo dentro de este.

Antes de darme cuenta ya era la hora de que empezara la fiesta y yo aún estaba en mi habitación, salí y fui a la habitación de Javier, una vez allí toqué la puerta y Javier salió con una camisa verde oscura y un pantalón negro, a un lado de él estaba Sarah con una camisa amarilla y una licra negra, les pregunté:

-¿Listo para ir chicos?-

-Claro, vamos para poder comprar comida- dijo Javier entusiasmado.

Bajamos los 3 al patio frente al edificio de las habitaciones, para nuestra sorpresa había mucha gente, solo decidimos dividirnos y divertirnos a nuestra manera, pasaron unas cuantas horas, yo estuve caminando desde hace rato, así que estaba cansado, mis piernas no daban para más, me tropecé con mi propio pie y caí sobre alguien, estaba algo aturdido pero nada fuera de lo normal, cuando me despabilo del golpe contra el suelo, adivinen sobre quien estaba, con aquella chica con la que me tropecé esta mañana, solo dije para mí mismo:

-De las 7.894.378 personas que existen en este planeta, ¿Por qué me tengo que tropezar con ella otra vez?-

Ella me gritó:

-¿¡Pero qué haces!? ¡Quítate!-

Me empujó y caí a un lado de ella, al levantarme no le dirigí la palabra y seguí caminando y me senté en una banca vacía para descansar las piernas, tras media hora, sentí una presencia cerca de mí, dije sin voltear:

-Se que eres tú, Mindy, ¿Qué quieres?-

-Pues... quería disculparme, te he tratado muy mal los últimos días, pero es porque, me...-

Sin dejarla terminar, un grito de terror puro sobrepasó el volumen de la música que se escuchaba en el sitio, mucha gente empezó a aglomerarse, yo le pregunté a Mindy:

-¿Oíste eso?-

-¿Qué habrá ocurrido?- preguntó ella, yo le dije:

-Luego me cuentas, vamos a ver qué pasó-

-Pero...- Otra vez sin dejarla terminar corrí hacia la multitud y tras pasar toda la gente, lo que vi me heló la sangre, uno de mis compañeros estaba tirado en el suelo, un chico estaba sobre él mordiéndole el cuello, como alimentándose de él, sentía una energía realmente oscura en el que se alimentaba del cadáver de aquel chico, tanta que me sentía abrumado.

Tras terminar de comer, lo que sea que sea eso, saltó a una gran velocidad y mató a otros dos adolescentes que estudiaban conmigo, de repente escucho en los megáfonos la voz de Javier, él decía:

-Evacuen la escuela, aquellos que no sean estudiantes, profesores o personal de limpieza; váyanse ahora mismo, el resto, al edificio de dormitorios, allí estarán a salvo-

Tras decir esto, todos empezaron a correr de forma desordenada, en el suelo se empezaron a abrir grietas y de estas, siluetas oscuras y desnutridas salían y atacaban a los que corrían, yo solo estaba parado en el sitio, no podía creer lo que pasaba, pero tenía que hacer algo, tomé la máscara de mi bolso y tras ponérmela empecé a intentar atacar a las figuras negras, pero se movían muy rápido, no lograba golpearlas, hasta que escucho un grito, el cual, no olvidaré, Mindy estaba en el suelo con varias de esas cosas cerca de ella a punto de matarla.

Yo, sentí una fuerza, el sentimiento del que Luminios hablaba, era el sentimiento de proteger a los demás, un sentimiento de no permitir que nadie muera mientras yo pueda evitarlo, comencé con pasos lentos y poco a poco aceleraba, corría a gran velocidad y me dispuse a atacar de frente, este poder, es el poder de unos de los elegidos de Luminios.

Fin del Capítulo 3

Luces y Sombras [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora