A SANGRE FRÍA.

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Sasuke abre sus ojos y siente un fuerte dolor de cabeza, todo su alrededor era más que distinto, incluso era nuevo que tuviera una ventana que mostraba la nieve caer de forma lenta y hermosa, habían grandes árboles de color blanco y el frío no era tan molesto como cualquier persona hubiese pensado.

Era relajante hasta que la mente de Sasuke da un giro brutal con una frase que de seguro lo atormentaría "Sakura ya no está aquí" "nos iremos de la ciudad". Los recuerdos llegan como fuertes golpes que lo debilitan en exceso, su hermano no había contestado sobre el paradero de la chica.

Con rapidez sale de su habitación y se encuentra con un corredor que contenía varias habitaciones, por falta de conocimiento al lugar decide caminar, las escaleras estaban cubiertas de una linda alfombra y su madera era clásica pero muy bella, al bajar se encuentra con una gran sala y en su centro una reconfortante chimenea, al lado estaba la cocina con un gran mesón y comedor en cerámica negra.

Sus ojos se humedecen porque si las cosas no estarán de este modo, esta sería la casa de sus sueños y una vida que siempre hubiese anhelado, su recorrido sigue hasta entrar a un despacho con una gran biblioteca y en el fondo yacía la persona que estaba buscando. No se atrevía a articular palabra alguna, no sabía si estallar en ira, dolor, golpearlo o abrazarlo, era un mar de confusiones.

– si te lo preguntas estamos en Canadá, elegí un vecindario con pocos vecinos y un gran paisaje que podrás ver desde tu ventana. – Sasuke aprieta los puños y deja caer sus lágrimas, ya no le importaba mantenerse fuerte frente a él.

– ¿por qué ahora vienes a darme la vida que siempre quise? ¿Por qué te gusta hacer las cosas cuando ya es muy tarde?

– no seas injusto...

– ¿injusto yo? Toda mi puta vida te rogué para que hicieras esto, te pedí de rodillas una vida normal, no me importaba dejar a mis amigos o escuela, lo hubiera hecho con tal de irme contigo a otro lugar pero nunca te importó... y ahora, ahora ya no vale.

– sí vale Sasuke, apenas tienes diecinueve y no es tarde para un cambio de vida.

– ¿si Sakura no hubiera llegado hubieses tomado esta decisión? – Itachi siente un gran nudo en la garganta – tu silencio se toma como respuesta, eres un imbécil y no por esto, condenaste a una chica que no tenía nada que ver, que no te hizo daño alguno.

– hablas así porque estabas enamorado.

– HABLO ASÍ PORQUE ERA IMPORTANTE... si tú morías por mí, yo moría por ella, planeaba hacerla escapar junto a ti, a pesar de estar enamorado yo pensé en ti ¿Cuándo pensaste en mí con esta decisión?

– siempre pensé en ti Sasuke, siempre, si tú morías por ella yo no lo permitiría, eres lo único que me queda y te protegeré a como dé lugar.

– ¿me protegerás igual que a nuestros padres? Porque si es así debería considerarme muerto como lo están ahora. – aquello había sido un fuerte golpe para el mayor.

– estás hablando de algo que no sabes.

– puedo ser más joven que tú pero no por eso soy idiota.

– ellos no murieron por mi culpa.

– Sakura tampoco. – Sasuke odiaba usar el sarcasmo pero se sentía más que herido, sin escuchar más se retira a su habitación y se deja caer en la cama con desgano, había dejado a Naruto sin decir nada, Karin también debía de estar preocupada pero todo sobresalía en Sakura, seguiría viva o no.

Sasuke ahora tenía una nueva vida a la fuerza, su mente no sabía cómo continuar, no procesaba todo lo que tendría que hacer. Con rapidez busca entre las cajas y toma su laptop, al encenderla nota que toda su información, incluyendo redes sociales han sido borradas, se imaginaba que sería una nueva persona.

Tras unos minutos de crear nuevos datos falsos obtiene una cuenta de Facebook, con facilidad encuentra a Naruto y al verlo conectado inicia una videollamada pero su amigo no contestaba y eso comenzaba a desesperarlo.

Al perderse la llamada recibe un mensaje de su amigo – "¿Quién eres?"

– "contesta idiota."

– "¿Sasuke?"

– "¿Quién más?"

– "¿a quién se le ocurre llamarse Junhyung?"

– "¡solo contesta!"

Sasuke nuevamente llama y esta vez Naruto contesta de forma desesperada – joder ¿dónde estás? Fui a verte a tu casa porque tu hermano y tú parecieron en las noticias como desaparecidos, cuando llegué todo estaba vacío y Karin está como desesperada.

– estamos bien no te preocupes... ¿sabes algo de Sakura?

– eso te iba a preguntar yo, pero ¿qué sucedió?

– no lo sé, desperté con una resaca terrible, Itachi me drogó con un café y desperté en mi nueva casa en Canadá. – Naruto casi se atraganta al escuchar todo.

– eres muy sutil para explicar las cosas... ¡¿Canadá?! Estás en la mierda.

– no digas groserías Naruto.

– pero mira quien lo dice.

– a ti no te quedan.

– bueno Junhyung... – Sasuke suspira y Naruto ríe – ¿qué harás ahora?

– sé que no puedo volver por ahora, Madara nos ha de estar buscando con su gente pero como te tengo a ti quiero que hagas varias cosas... la primera es que le digas a Karin que estoy bien, no le digas como me comuniqué contigo, también quiero que averigües si el cuerpo de Sakura ha sido encontrado, puede que aun siga viva.

– un poco difícil encontrarla, con vida lo es más.

– lo sé.

– pero te ayudaré, no te preocupes.

– gracias, mantenme informado de todo y nadie puede saber de mí... ni siquiera tu novia.

– ¿por qué ella habría de saberlo?

– porque le cuentas todo.

– está bien... me alegra saber que estás bien.

– lo sé... gracias por estar cuando te necesito.

– tranquilo Junhyung, estaré siempre.

– ¿no superaras el nombre, no?

– jamás, descansa.

La llamada se corta y Sasuke cierra su laptop, algo le decía que Sakura estaba viva en cualquier lugar y su trabajo sería averiguar en donde se encontraba, pero todo era muy difícil sin su presencia allá, mucho peor si estaba tan lejos y como una persona desaparecida.

Era peligroso establecer contacto alguno, podrían rastrearlos e ir por ellos, a pesar de estar enojado jamás expondría a Itachi y le era más fácil que su presencia estará fuera de todo esto, había que tener precaución.

Canadá, nunca imaginó que llegaría estar en ese lugar, era fantástico pero ahora se sentía como algo simple, la mente del Uchiha menor se había quedado en Seúl y no regresaría hasta tener resultados concretos de todo lo que dejo pendiente, había más de un plan y muchas personas que podrían ayudarlo, todo era cuestión de tiempo, buenas jugadas, de estar un paso adelante que Madara para recuperar a su chica... para acabar por completo con aquella compañía que tanto mal le había hecho a su familia.

La mente de un Uchiha era peligrosa, macabra, fría y calculadora, esta vez no habría piedad ni buenas obras, todo sería como las personas lo elegirían y tan fácil como lo quisieran. Sasuke ya no sería el hermano de Itachi, ahora lo conocerían por algo mucho más grande que ese apodo familiar.

UN AMOR INESPERADO (SASUSAKU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora