Deranged. (Larry Stylinson.)

Capítulo siete.

Punto de vista Louis.

— No— Sacudí mi cabeza— Ellos me llevarán a casa.

— Asumirán que estás demente, el hecho de que estás conmigo lo hace peor— Me dijo. Llevé mis manos a mi cara, tomando lo que él me había dicho.

— Esto no puede estar pasando— Susurré, solo quería ir a casa y pretender que esto era solo un pigmento de mi imaginación. Las criaturas y los monstruos no son reales. ¿Quizá estoy demente? Paré de pensar, escuchando una ramita romperse detrás de nosotros.

— Oh, está pasando— Susurró antes de alejarse corriendo.

— ¡Espera!— Grité, corriendo tras él. Mala idea; no sabía a dónde ir, esquivé un manojo de árboles y postes, tratando de alcanzar a Harry. De repente, sentí algo afilado golpear mi espalda. Mi cuerpo extrañamente reaccionó, prácticamente cerrándose. Caí sobre mis rodillas, y con mis ojos medios abiertos, vi a Harry caer contra un árbol, intenté ayudarlo. Algo estaba saliendo de su espalda, pero no pude verlo bien porque todo se había ennegrecido rápidamente.

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No pertenezco aquí, pensé mientras  caminaba pasando a pacientes susurrando para ellos mismos. Un hombre en la esquina estaba chupando su pulgar, viéndome. Traté de hacer mi mayor esfuerzo de ignorar su mirada mientras me sentaba en el borde del sofá vacío. Este lugar lucía apagado, incluso los pacientes estaban vestidos de un azul apagado. Miré mi rodilla, tomando el dobladillo de mi vestimenta azul. Prácticamente salté cuando sentí un toque en mi hombro.

Miré y noté a una chica que estaba parada frente a mí.

— ¿Por qué estás aquí?— Ella sonrió, tomando asiento a mi lado. Su rubio cabello lucía sucio, junto a su rostro maltratado; me estaba preguntando qué hacía ella aquí también.

— Y-yo no sé exactamente. No me dijeron— Susurré, viéndola— ¿Por qué estás tú aquí?
Ella se encogió de hombros.

— Drogas, sexo, asesinato. Lo usual— Mis ojos se abrieron mientras hacía mi mejor esfuerzo para escabullirme despreocupadamente de ella, sin embargo fue demasiado obvio—. Sí, todos ellos tratan de esconderse de mí.

— Yo no...

— Guárdatelo— Rió, rodando sus ojos. Algo captó su mirada detrás de mí, algo interesante—. Oh, maldita sea... Está de vuelta.

Giré mi mirada detrás de mí, mis ojos se abrieron. Allí estaba él, vestido en la misma vestimenta como todos los demás. Su cabello estaba enmarañado, había cortes dispersos en los tatuajes de sus brazos.

— Nunca en mi vida pude pensar que lo atraparían— Dijo.

— ¿Por qué?— Pregunté, girando mi cara hacia ella tan pronto como Harry se sentó en un sofá.

— Su actitud y la manera con la que él trataba de pelear con los enfermeros el año pasado. ¡Incluso nadie sabe como escapó!— Se burló, sacudiendo su cabeza en asombro.

— Iré a hablar con él— Le dije. Justo cuando me paré, ella me trajo de vuelta.

— Ten cuidado. Es un lunático— Advirtió.

— Trata de quedarte en un terrible túnel con él por la cantidad de tiempo más larga. Ve lo que pasa entonces— La dejé pensando en ello mientras me acercaba a Harry. Una vez que él me notó sentarme frente a él, sonrió.

— Es bueno verte, Louis.

— ¿Cómo escapaste?— Lo corté, mi mente estaba llena de curiosidad.