Bienvenidos a INELK LENIO ENTERTAINMENT, la empresa número uno del entretenimiento de Corea donde una vez dentro no hay vuelta atrás. Una academia de formación de Idols rodeada de competencia, rumores y escándalos en la cual ahora formas inesperadam...
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Lo miré divertida y me burlé ante su anterior comentario, él sólo se dedicó a mirarme con una sonrisa de oreja a oreja que dejaba ver sus relucientes dientes y sus hermosos hoyuelos.
— Es enserio ____. —dijo riéndose un poco— No te rías.
Negué con la cabeza mientras me reía levemente.
— Eres muy tierna —agregó esbozando una sonrisa mientras acomodaba sus gafas.
Intenté evadir el contacto visual pero ante tal comentario era casi imposible, mis mejillas se tornaron de un color carmesí intenso inmediatamente .
Había pasado tiempo ya de aquella reunión con mi padre, toda la semana estuve junto a el apuesto Jong Taeyang puesto que según habíamos acordado todos ese día era él quien iba a ayudarme con todo lo necesario en el papeleo pendiente para poder viajar lo más pronto posible.
Respecto a lo que había pasado en aquella situación con mi padre pues finalmente este decidió dar un salto de fe totalmente a ciegas, sólo unas cuantas pruebas, firmas y una videollamada le bastaron a él para corroborar que todo este proceso de selección era totalmente verídico y gracias a esto logró llegar a la decisión definitiva de que me iba a dar la oportunidad tan esperada de experimentar sin perder la comunicación total.
El azabache me peinó un poco el cabello con su mano y después se centró en buscar algo en los bolsillos de su bolso.
— Aquí está —dijo sacando algo envuelto y ofreciéndomelo— ábrelo con cuidado, me tomó media hora envolverlo así de estético.
Se rio con una sonrisa demasiado encantadora, agarré la pequeña caja envuelta y con cuidado fui dañando su envoltura, Jong me miraba atento, estaba segura que si la dañaba bruscamente me iba a hacer un comentario al ser tan descuidada así que simplemente preferí ahorrármelo.
Abrí la pequeña caja y me encontré allí con el objeto que tantos suspiros de frustración me había hecho sacar los últimos días.
— Felicidades —dijo mirándome directamente a los ojos demostrando que se encontraba plenamente feliz por mi.
Sin pensarlo tres veces o más, lo abracé. Su olor corporal inundaba mi nariz, su perfume era simplemente exquisito, tanto así cómo lo era él.
Había sacado rápidamente mi visa, de verdad había logrado agilizar mi papeleo y no sé que acto de magia habría hecho pero tres días después ya la tenía en mis manos.
— Ya estás lista para viajar junto con los demás —agregó acomodándose su pelo azabache que había despeinado yo gracias al abrazo inesperado.
No pude evitar agrandar mi sonrisa.
— Enserio muchas gracias Taeyang, eres muy amable —dije sonrojándome, eso era lo que causaba su sola presencia ante mi.
