― Yo te amo mas. Eres la prioridad más importante para mi en estos momentos.
― ¿Solo ahora?
― Siempre y cuando tu lo desees ser ― respondió.
Yo salí de la ducha. Mientras él se bañaba yo me cepillaba los dientes.
― Listo ― dijo envolviéndose en la toalla blanca.
― Oh, mi bebé es rápido ― le di un beso en la mejilla
― Si, me provocas a hacer cosas ― me aferro al lavamanos
― No, ve a cambiarte ― le avise
― Como diga señorita ― me guiñó el ojo
“Jb”
Me envolví en aquella toalla blanca y camine hasta la habitación de ____. Saque una ropa casual y me cambie. Al terminar escuche el sonido del timbre. Dejando mi celular en la cama me dirigí hacia la puerta. Al abrirla se encontraba un chico con la misma altura que yo, cabello arreglado y al parecer pertenecía a una familia rica.
― Hola ― lo mire extraño
― ¿Esta ____ aquí?
― ¿Quien la busca? ― lo interrogué.
― Digamos que alguien importante para ella. ¿Tu eres?
― Hermano yo hago las preguntas aquí. ¿ Me dirás quien eres?
― Su novio , algún problema “hermano” ― cambió la voz guardando su celular en su bolsillo.
No te atrevas a querer ser el chico listo conmigo.
― ¿Su novio? extraño, porque bueno, nunca pensé que tenia una alma gemela o algo por lo parecido.
― Escucha, no tengo tiempo para juegos con menores o te quitas del medio o lo haré yo mismo.
―Anda. Inténtalo ― lo reté. El sonrió y me miro de pie a cabeza para luego mirarme venenosamente a los ojos.
Intentas acercarte medio centímetro a ella y juro que te partiré la cara, pensaba sin dejar de mirarlo.
― Bien no le arruinare la noche a ____. ―subió la mirada riendo burlonamente ― avísale a Wayland que hoy habrá una competencia y si tenemos que pelear por el primer lugar te recomiendo que te prepares y te pongas los guantes― sonrió y me lanzó una mirada de asco desapareciendo por las escaleras.
¿Wayland? ¿Quien es Wayland? ¿Y quien se cree que es el tipo ese?
Con la sangre más arriba de la cabeza cerré la puerta y me senté en el sofá. Estaba furioso y con ganas de partirle la cara al chico ese, pero me tranquilice no podía pagar mi enojo y mis celos con ___ no con ella otra vez.
Deja los celos Justin, concéntrate en ___, me decía a mi mismo.
― ¿Quien era? ― pregunto envuelta en aquella toalla blanca. Sus piernas me provocaban estaban algo húmedas y mis manos solo querían arrancarle esa toalla y hacerla mía de una vez por todas.
― No era nadie importante ― respondí.
― Ok ― se volteo dirigiéndose a su Closet de ropa ― mi madre quiere conocerte.
― ¿Tu mama sabe que existo? ― dude acostado en el sofá.
― Si ― soltó una risita juguetona ― bueno mas o menos.
― Genial, si quieres podemos pasar un tiempo con tu madre, que se yo. Salir y conocernos mejor . Mañana seria el día perfecto― propuse deseando que ella contestara con un “si Justin buena idea”.