La Llamada

1.2K 82 47
                                    




            

Amaia

Entro en casa y son las 2.30 am, vaya si han tardado en el hospital, he perdido completamente la noción del tiempo, miro mi teléfono y tengo llamadas de Alfred, de Marta y de Javier... todas pueden esperar.

Respiro profundo y veo que en la cocina aún reposa la taza favorita de Alfred, aún tiene un poco de café.. y en el sofá una de sus camisetas blancas, la debió dejar allí en unas de las tantas veces que follamos o hicimos el amor.... Ya no sé ni que hacíamos, solo que las consecuencias de nuestros múltiples actos han hecho que me encuentre en esta situación.

Voy a mi habitación y todo huele a Alfred, ayyy no sé como se vas a tomar esto se que le sorprenderá pero yo no tengo miedo, llevo una parte de lo que más amo dentro de mi y eso .

Me siento mal por no estar llorando desesperada por lo que esta nueva situación pueda traer para mi vida. No me siento desdichada, ni avergonzada, no pienso ni cuestiono por que a mi, o como pudo ocurrir por que soy consciente de cada uno de los orgasmos que he tenido desde que conocí a Alfred. No tengo miedo, no me siento agobiada, ni triste. Si algo tuve claro desde muy pequeña era que quería ser mamá. Y dios no se si este es el mejor día de mi vida o yo que sé, pero es el día en el que sé que nunca jamás voy a estar sola. Que vas a estar junto a mi siempre y que voy a poner toda mi atención y mi cariño en ti.

Mi desafortunada relación con mis padres siempre me ha hecho pensar que el día que fuera madre me iba a implicar al máximo, que iba a apoyar y a escuchar a mis hijos siempre a no dejarles solos, a ser siempre su guía. 

Me tiro en la cama y pienso en Alfred, tal vez no estas preparado, pero estoy segura de que vas a ser el mejor papá, tendré que pensar como se lo voy a decir... y en el impacto que esta noticia traerá para los dos.

Me quito, este vestido tan bonito y me enfundo la camiseta de Alfred, creo que hoy no estoy para pensar mas...cuando estoy a punto de dormirme, mi estomago me recuerda que ahora somos dos, así que me levanto y pongo un par de huevos con bacon en el sartén y los devoro con pan y nesquik, cuando me siento llena y caliente me meto de nuevo en la cama y sueño plácidamente con unas manitos perfectas que sujetan mi dedo índice, tengo la fe de que todo va a salir bien.

Al día siguiente me despiertan unos golpes en la puerta con tanta fuerza que pareciera que quisieran derribarla.

Abro la puerta con la angustia de que el edifico este en llamas y vengan a rescatarme o que algo terrible hubiese pasado y me encuentro a Aitana y a su madre visiblemente preocupadas.

         -Amaia, cariño como estas, nos tenias preocupadas

-Hola chicas, pasar....Voy a poner café queréis? Muero de hambre

-Que paso ayer, nos tienes preocupadas, ganaste y no saliste a recoger el premio, te he ido a buscar y me han dicho que te habían llevado al hospital. Amaia qué paso?

Sabía que el interrogatorio había llegado, sabía que era el momento de sincerarme, tenia que buscar la forma de que nadie saliera perjudicado, especialmente mi bebe. Sabía que esta noticia podría causar reacciones encontradas, pero por mí pero sobretodo por él tenia que ser valiente.

-       Pues nada que estoy embarazada.... He tenido un mareo y he perdido el conocimiento. Pero ya me encuentro mucho mejor. ¿Tostadas?

- Tu eres tonta, no estoy para que me vaciles por favor.  Amaia madura.

-       Estoy siendo mas madura que en toda mi vida y sincera, esa es la verdad. Ayer me hicieron una prueba y estoy embarazada, la próxima semana tendré que ir donde el ginecólogo para saber que va todo bien.

Alcanzar a una estrellaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora