(AU) Reckless Behavior: Badass Angel. |Harry Styles|

Capítulo 22

«she's an angel.. my only angel.»

.
.
.
.
.

Liam recogió a Calleigh al estudio de baile y tuvo la amabilidad de dejar a Alessa en su casa, para buscar un par de tiquetes para los bolos que ella conservaba desde hace algun tiempo y deseaba usarlos con sus amigas.

La casa de la familia Styles lucía oscura, las luces estaban apagadas por lo que ella dedujo él no se encontraba allí, con un ensordecedor sonido que la puerta principal producía, entró y al pasar por la cocina tomo una lámina de queso que enrolló para comérselo. Subió las escaleras con dificultad por el dolor latente en sus pies y entró en su habitación rebuscando esos tiquetes en las cosas regadas en sobre su cómoda.

Por otro lado, Harry vió su habitación totalmente a oscuras siendo iluminada por la diminuta luz de la pantalla de su celular, con una llamada entrante de Louis en la mesita de noche que estaba a su lado, se movió para cogerlo cuando se percató de la
existencia de otra persona en su pecho.

Era ella.

Alarmado y a la vez escuchando pasos en el pasillo de afuera, agitó a Victoria para que se moviera antes de que ocurriera algo de lo que el se podía arrepentir toda su vida. Su mente estaba turbia, el sueño podía con él y no entendió a la primera por qué Victoria estaba con él en su cama.

—¡Necesito que te escondas!—susurró fuerte.

La rubia platinada un poco confusa, lo miro arqueando las cejas.

—¿Qué hora es? ¿Qué pasa?—preguntó incrédula, levantándose.
—¡Mierda sólo métete en el armario y no salgas!—le susurró asustado.

Harry encendió la luz y peinó un poco su cabello con sus dedos para salir a enfrentar lo que se avecinaba.

Alessa dió un respingón al ver a Harry en el pasillo sin camiseta y con aspecto de angel tcaido en la batalla, hermoso y somnoliento. Él le regaló una sonrisa obligada y la envolvió con su cuerpo haciendo que ella se separara en busca de oxigeno por su fuerte agarre.

—¿Cansada?—preguntó, se mordió el labio y evitó mirarla a los ojos. Estaba mintiendo.
—Demasiado, casi me desmayo hoy.—puso los ojos en blanco y resopló de cansancio.

Los ojos de Harry se abrieron ligeramente y empezo a examinar su rostro con desespero, Alessa detuvo las manos de Harry en sus mejillas y beso sus dedos tiernamente. Acarició con dulzura las mejillas de Harry y besó su nariz.

—¡Cálmate! Estoy bien, lo juro Harry. Mírame, estoy aquí contigo.—murmuró, ahora con las manos en la cara de él.
—Perdóname Aly, perdóname por favor.—murmuró con desespero.

A Alessa una sonrisa boba le adornó el rostro y besó su mejilla dulcemente.

—Ya pasó, pasó hace mucho. No tengo nada que perdonarte.—dijo con suavidad—. ¿Qué hiciste hoy?—preguntó.

Harry se tensó en su totalidad y por un segundo encontró la ventana al final del pasillo que daba al patio trasero una viable manera de escapar.

—Nada, ya sabes. Limpié un poco la cocina. ¿A poco no quedo reluciente?—dijo.

El ruloso jugaba con sus nudillos detrás de su espalda.

—Oh bueno, honestamente quedó exactamente igual—rió—. Pero sí, esta linda. Gracias por hacerlo. Liam y Calleigh me esperan afuera. Vamos a los bolos y  Kenzie también, ¿Quieres venir?—le preguntó, con total amabilidad.
—¡No no! tendría que ducharme.. y cambiarme.. Tardaría demasiado. Me quedaré, te esperaré despierto. Quiero estar sólo contigo.— sonrió suave.