(AU) Reckless Behavior: Badass Angel. |Harry Styles|

capítulo 18

«You don't understand, what you do to me when you hold his hand,
We were meant to be but a twist of fate
Made it so we had to walk away»

Alessa abrió los ojos suavemente intentando ver dónde estaba, su cabeza le dolía y sentía sus ojos hinchados de tanto llorar. Ahogó un grito con desesperación al recordar vagamente el incidente de la noche anterior con Jimmy, Harry escuchó como sus pulmones habían retenido aire ruidosamente y antes que ella pudiese sentirse abrumada y le diera otro ataque de pánico, la envolvió con ternura proporcionándole calor y tranquilidad. Alessa no recordaba todo a la perfección, solo recordaba ver a Louis y Harry entrar furiosos y consternados al baño. De alli no recordaba nada más. Sin importarle lo abrazó, rodeando sus brazos por el cuello sin decir alguna palabra y lo besó justo en el lugar, Harry la sujetó por el torso e inundó su rostro en su hombro.

-Cómo eché éste momento de menos.-le susurró, su voz estaba áspera y grave por dormir.

Alessa suspiró profundo, casi diciéndole que ella también.

-Por supuesto, no por el mejor motivo.-reparó, al escucharla suspirar profundamente con pesadez.
-Gracias.-se limitó a responder.

Dejó de abrazarlo y a continuación ambos conectaron miradas que a cada uno lo hizo sentirse agradable.

-¿Quieres hablar sobre esto?-le preguntó suavemente, acariciando su mejilla para procurar no alterarla.

Alessa sonrió sin ganas.

-No, ahora no. Estoy bien.. Eso creo. Solo quiero quedarme aquí un rato.-confesó, acostándose de nuevo.

Harry se acostó nuevamente y se acurrucó en ella como un niño.

-Nos quedaremos aquí un rato.-sonrió, haciendo énfasis en la primera palabra.

En la habitación de al lado, Kenzie discutía con Louis por el simple y hasta tonto hecho de que ninguno quería cerrar la persiana para apasiguar la luz del día que les parecía una maldita tortura, tomando en cuenta la resaca. Finalmente y como era de esperarse  Louis se levantó a regañadientes y cerró la persiana, Kenzie le miró con ternura y dió media vuelta para seguir durmiendo. Él sonrió a sus espaldas y  giró el pomo haciendo la puerta abrirse sin hacer ruido o Kenzie se pondría como una fiera, caminó hasta la primera habitación del pasillo que estaba ocupada por los hermanos Styles y la tocó con cautela, del otro lado Harry soltó un improperio pues estaba a punto de conciliar nuevamente el sueño con Alessa y con cansancio abrió la puerta. Louis le dió un golpecito leve en la cabeza acompañado de la sonrisa más risueña y honesta del mundo, pasó sentándose en el mismo lugar donde estaba Harry con Alessa y le depositó un beso en la sien.

-¿Cómo te sientes?-fue lo que dijo, viendo a Alessa con serenidad.

Alessa se encogió de hombros.

-Bien, supongo.-contestó ella.

Louis le dió un abrazo rápido y pasó su vista a Harry quien seguía parado en la puerta viéndolo con horror y fatiga.

-¿Y a ti qué te pasa idiota?-espetó Louis, neutro.

Alessa rió en voz baja y eso hizo a Harry sonreír  inconscientemente. El chico de ojos turquesa captó el momento y sonrió.

-Acabas de interrumpir algo. Es como si fuera ahora mismo a tu habitación cuando estás a punto de no sé, tener sexo oral por parte de Kenzie.-contestó el ruloso, con fastidio.
-¡Harry!-lo regañó Alessa.

Él la miro retándola y ella le contestó lanzándole una mirada fulminante.

-Mmm.. De hecho, creo que.. Debo la más sincera disculpa si es así.-comentó Louis, con las cejas arqueadas viéndolos a ambos.