capítulo 10

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—Yugi, ven —Se dirigió a él completamente serio.

Sin decir nada, Sólo se levantó de la mesa y siguió al tricolor mayor.

Caminaron y lo dirigió hacía su habitación para que nadie escuchara lo que tendría que decirle al menor.

Cuando entraron en la habitación, yami cerró la puerta y encierra a yugi contra la pared.

—Lo que viste no fue acción mía. Ella me beso, Yo no la bese. No pienses mal por favor, Perdoname —Lo mira preocupado.

—¿Por qué me das explicaciones? Si nosotros no somos nada.—Le contestó fríamente mientras mantenía su mirada alejada de él.

Yami sintio una punzada en el pecho por las palabras del pequeño.

escuchar eso le dolió, Fruncio el ceño y decidió contestarle.

—Si, Ya se que no somos nada. Pero tú enserio me gustas, Y no quiero que esto quede así. Yo quiero seguir viéndote, Quiero seguir besándote, Porque tu yugi... No sabes lo que causas en mi. Me vuelves completamente loco con tu simple presencia, No sabes todo lo que siento por ti. Nisiquiera te haces una Mínima idea de cuanto te amo.
Si yugi ¡TE AMO! Y ¡siempre lo he hecho! Siempre estuve enamorado de tí, Tu sonrisa me atrapó desde el momento en que te vi. Tus grandes ojos amatistas me enamoraron, Tu personalidad y tu dulce y hermosa sonrisa ¡Eres jodidamente perfecto Yūgi Mutō!
Se que "No somos nada" Pero quiero intentarlo contigo, Quiero que me des la oportunidad de poder hacerte feliz. Y créeme que te haré inmensamente feliz, Porque lo significas todo para mi, Y no hay nadie más en mi corazón, Sólo te amo a ti.
Cada vez que te veo mi corazón no deja de latir fuertemente y mi pecho comienza a recibir punzadas, Cuando escucho tu nombre hace que me de un cosquilleo por todo el cuerpo. Y siempre me imaginé escenas en donde nos tomamos de las manos y somos felices, Porque eso quiero yugi, Quiero ser feliz solamente contigo. No quiero nada más que eso —Yami lo Mira con lágrimas en sus ojos.

Él abre los ojos tan grandes como puede, se le empezaron a cristalizar los ojos y lo abraza con todas sus fuerzas.

Lo mira a los ojos y comienza un dulce beso.

Yugi estaba tan feliz de estar en esos momentos con él.
Yami se separa por unos centímetros de yugi y decide hablarle nuevamente.

—Así que por favor yugi... Dame sólo una oportunidad, Y Prometo hacerte feliz... —Yami no alejaba la mirada de Yugi ni por un segundo.

Las lágrimas de Yugi comenzaron a caer con más rapidez y miro a su mejor amigo a los ojos.

—Te voy a dar la oportunidad. Ya que yo también te amo, Yami. Amo todo de tí. No hay momento en que no piense en tí, Intente sacarte de mi cabeza pero no pude, Estoy tan enamorado de tí hasta que incluso me imaginaba conversaciones en las que tu te me declarabas. Siempre pensaba en eso porque quería que pasará, Y paso. ¡Estoy tan feliz de tenerte en mi vida!
De verdad me encantas y no quiero que esto quede así, Quiero seguir contigo y estar siempre a tu lado, Siempre quise que me vieras a los ojos y que me dijeras que me amabas, estuve enamorado de ti estos últimos 3 años. Estoy realmente feliz, Gracias por estar aquí conmigo. Yo también quiero estar solamente contigo, Eres todo lo que quiero... Quiero ver esa hermosa sonrisa todos los días, Esa sonrisa que me da alegria de tan solo verla, Me encantas... Así que ya no llores yami, Por favor...—Lo Miró a los ojos y le dedicó una gran sonrisa.

Yami sonrío igualmente y ambos se abrazaron.

Yugi:

De verdad estoy muy feliz,

Quisiera que este abrazo no se termine nunca, quedarme para toda la vida en sus brazos.

Él es tan dulce, En sus brazos me siento tan bien.

Yami:

Mi pequeño es tan tierno, Cuando sus mejillas se enrojesen es tan lindo.
Este chico me tiene totalmente rendido a sus pies.

Daría y haría todo por el, me gusta demasiado.



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