Otoño, 2007.
A la llegada de Octubre no solo llegaron los vientos y las hojas naranjas.
Si no también un papel con las horas libres de Yoongi y las suyas propias. Aquel chico había conseguido congeniar algunas horas para sus lecciones de piano.Seokjin le había sonreído como si fuera la mejor noticia de su vida y Yoongi solo le había mencionada que no era nada, que podría incluso ser divertido.
—¿Qué demonios? ¿Cómo...?—Namjoon no había estado muy atento a las actitudes del ahora pelirosa. Seokjin le había dicho que necesitaba un cambio, no imaginó que tuviera algo que ver con su cabello. Aunque no era algo de lo que pudiera hablar teniendo el mismo su cabello con motes verdosos.
—Mientras tú estabas con tu equipo de baloncesto, yo conseguí lecciones de piano. —Seokjin no pasaba todos los días en la mesa de Hoseok, tampoco quería ser un estorbo o poner incómodo a Yoongi, ya tenía su atención y por el momento eso era suficiente.
—¿Qué hay del club de natación?—preguntó el moreno mientras terminaba su comida.
—No hay problema con ello. Las prácticas no son todos los días. —mencionó sin darle más importante al asunto.
—¿Y las convocatorias para el consejo estudiantil?
—Fui seleccionado por la clase la semana pasada, ya sabes como el mejor candidato para ser parte del consejo.—la comida seguía siendo la prioridad para Seokjin mientras seguía la plática con el moreno a su lado.
—¿Podrás con todo?
—¿Dudas de mi? —actuó ofendido colocando una mano sobre su corazón. —Ten fe en mí Nammie, todo estará bien.
Las palabras brotaban con más seguridad que nada, con sonrisas al aire y uno que otro beso en la boca de Namjoon, claro ha sabiendas de que ni Yoongi ni Hoseok estaban presentes o que estos no le prestaban atención.
No le importaba mucho, pero tampoco quería que Yoongi pensara que era el tipo de chico con una relación.
—¿Iras con él hoy?
—Si. Será divertido.
—¿Qué quieres de él exactamente?
—Por ahora, su atención me basta. Después no lo sé, ya tendré tiempo para averiguarlo. —Seokjin terminó de comer y sin reparos beso a Namjoon antes de irse a su aula.
Era extraño como no tenía en mente lo que quería hacer con Yoongi, no con exactitud al menos. Sabía que quería su atención y quería tenerlo dependiente a él, muy fácil. Pero, ¿y después? ¿Qué más podría obtener?
Seokjin normalmente no tenía grandes deseos, teniendo todo al alcance de sus manos, las cosas materiales pasaban a un segundo plano, he ahí el porque cuando deseaba algo, estos constantemente eran personas.
La adoración de su primo Jimin.
La admiración de Jungkook.
La atención de Namjoon.
El primer amor de Jisoo.
El recurrente sentido de alabanza de sus compañeros.Y más...
Pero Yoongi, ese chico podía ser más que solo un nombre en su lista de admiradores.
•••
El día se fue en un abrir y cerrar de ojos. Seokjin se preparaba para ir al salón de música. Según las notas de Yoongi sus lecciones podían dar inicio desde entonces.
—¿Hola? —el aula era grande. Bastante espacio para todo lo que había ahí. Desde instrumentos de viento, algunos de cuerda, las percusiones y claro el gran piano de cola que se encontraba al centro.
No parecía haber nadie, Seokjin decidió dejar su mochila cerca de la entrada, y pasó a quitarse el saco del uniforme para quedarse en la simple pero costosa camisa, aflojó su corbata y arremangó las mangas hasta su codo, quedando más casual.
Su cabello apenas acomodado y su sonrisa un tanto desaparecida.
No sonreía si la situación no lo ameritaba.Y sin Yoongi ahí, no tenía porque mantener la sonrisa falsa en su cara.
Camino por el lugar, no había estado en la sala de música, y era muy diferente a la que tenía en secundaria, sin dudas esta era mucho más amplia, mejor iluminación y una cantidad considerablemente más alta de instrumentos. Tomó una de las guitarras y rasgó sus cuerdas por unos instantes, hasta que la voz de Yoongi llegó.
—Lo siento. He tenido que quedarme un poco más en clase, por lo del consejo estudiantil . —habló mientras dejaba su mochila en el suelo.
—¿Serás parte del consejo? —preguntó el pelirosa dejando la guitarra aún lado.
—Me han seleccionado pero, lo he rechazado.
—¿Por qué?
—En realidad, no me gusta compartir mucho con la gente, no más de lo necesario claro. Tu hermano por ejemplo y tu, ya son muchas personas. —Yoongi ni siquiera lo observaba.
Se movía apresuradamente por el lugar, ágilmente y con soltura, como si ese lugar le perteneciera.
—¿Vienes? —Yoongi finalmente alzó su rostro, después de tomar asiento frente al piano.
—Por supuesto.
Seokjin camino pausadamente, disfrutando de la bella vista de Yoongi frente al piano, con el uniforme desaliñado, el cabello revuelto y ojos oscuros expectantes.
—¿Desde hace cuanto tocas el piano?
—Digamos, que fue mi primer amor. —habló con una sonrisa en la boca. —Nadie le ha derrocado el lugar.
Seokjin no pudo sino tomar esas palabras como su nuevo reto.
•
•
•Hola.
Cherry aquí dejando un capítulo que espero les guste. Gracias por el apoyo asdfghjklñ.
Espero seguir mejorando y darles algo bueno que leer.Muchas gracias por la confianza de seguir leyendo. ❣️
Nos leemos pronto.
—Cherry. 🍒.
Fighting.
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Obsession |SUJIN|JINSU|KSJ+MYG
Aléatoire¿Hasta donde es capaz de llegar Seokjin con tal de tener a Yoongi? Seokjin ha desarrollado algo más que un deseo por Yoongi. Yoongi no tiene intención de negarse a Seokjin.