Antes de pedir pizza le pedí a Stephen que me llevara a casa a por algo de ropa ya que voy a pasar la semana en la suya.
-¿Lista?- pregunta Stephen desde la puerta en la cual está apollado.
-Sip, vayámonos antes de que me arrepienta.
Stephen se ríe y salimos de casa, tras cerrar la puerta nos subimos al coche y nos encaminamos a la casa de Stephen.
Entonces recibo un mensaje:
Marcus:Al final no te has despedido de mí, espero que estés bien, cualquier cosa llámame. Te quiero❤
Yo:Lo siento mucho me entretuve con una amiga, estaré bien, disfruta. Te quiero más ❤-Oye Stephen-lo miro- ¿cómo sabías que mi hermano se iba de excursión?
Stephen se ríe y yo frunzo el ceño.
-Jugamos juntos al fútbol, ayer me comentó que se iría hoy- dice- pensé que sería una buena oportunidad.
Asiento y seguimos en silencio hasta llegar a casa.
-¿Dónde dormiré?- pregunto.
-Pues sólo tengo una habitación decente, que es la mía, yo dormiré en el sofá.
-Oh...no, déjame a mí el sofá.
-Eres mi invitada, déjame ser agradable, siendo así no te enamoraré.
Suspiro y subimos a la habitación a dejar mis cosas y así también me cambiaré.
Es una habitación bonita y ordenada, las paredes son azules, en el centro hay una cama enorme, junto a la ventana hay un escritorio con algunos libros encima y hay una puerta que lleva a un baño.-Es bonita- digo y Stephen asiente como respuesta.
-Puedes dejar tus cosas por dónde veas, ahí tienes el baño, cámbiate mientras yo pido la pizza.
Asiento y voy a la mochila a coger mi pijama.
-Mierda- digo dándome con la palma de la mano en la frente.
-¿Qué pasa?- pregunta Stephen.
-Me ha quedado el pijama encima de mi cama- suspiro.
Stephen va al armario y coge una camiseta suya.
-Ten, te servirá- me la extiende y sonríe.
-Muchas gracias -sonrío cogiéndola y me dirijo al baño a darme una ducha.
Cuando salgo del baño la habitación está vacía asique bajo al salón y allí está Stephen cortando la pizza.
-Comidaaa- digo emocionada.
Se gira y me mira, entonces veo como se muerde el labio inferior.
-Te queda mejor que a mí- ríe y yo hago lo mismo- si de verdad fuera como crees, estaría ya encima tuya nena.
Bajo la mirada al suelo sonrojada y sonrío. Stephen de acerca a mí y me levanta la cara.
-Estás muy guapa sonrojada- sonríe.
Siento como empezamos a acercarnos y esta vez no quiero pararlo, pero tengo que hacerlo.
Siento el roce de sus labios contra los míos y mi piel se eriza.
-Sammy...- susurra- si no quieres hacerlo...
-Stephen es mejor que pares, por favor.
Sin más se aparta de mí y yo miro al suelo.
-Ya te dije que yo no funcionaba así- comento.
-Lo sé, no pasa nada, ha sido culpa mía.
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El chico malo
Romance-Ten mucho cuidado con lo que haces preciosa- susurra de nuevo en mi oído.