No es amor... ¡RELÁJATE!

Noches de despedidas ...

 

La fiesta era tan elegante, era un precioso jardín decorado con luces la luz de la luna podías apreciarla, todos iban vestidos tan elegantes que ella agradeció pedirle aquel vestido a Odett.

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—No mencionaste que la boda sería tan impresionante—ella miro con asombro unos bellos candelabros de caían ¡todo estaba divino!

 

—Vengo por compromiso, no creo en estas bobadas...—gruño él.

 

—Eso no quiere decir que no sea muy bonito.

Caminaron hasta la mesa de honor y esta vez Giselle quería salir corriendo ¡¡no podía creer estar haciendo esto!!

 

—Mama ella es Giselle, mi cita de esta noche— Giselle ella es mi madre Carolina y ella es mi hermana pamela —se dieron la mano y sonrieron gentilmente.

—Mucho gusto y—¡¡ felicidades!! —¡¡Tu boda es de ensueño!..

Pamela la tomo de los hombros y la atrajo hacia ella, preciando muy fuerte su cuerpo sobre el de ella.

 

—Wow pensé que jamás me volvería a presentar a  nadie mi hermanito después de esa arpía—¡¡ eres lindísima!!—Quien es la arpía... ¿¿Siento celos??—¿¿ Cómo será ella?? ....... Joder.—pensó ella pero solo se limitó a sonreír a la bella novia.

 —Que inoportuna pam... vamos a bailar mejor giss— el tomo por la cintura y la saco de ahí antes de que supiera más de él.

 

Bailaron casi toda  la noche pegados abrazados y besándose, a él no le importo las miradas de  asombro de algunos de sus familiares sabía que esta era su última noche con ella y quería disfrutarla ¿LA ULTIMA? El solo hecho de pensarlo lo lastimo pero decidió no decir nada se mantuvo a la raya y disfruto de aquel momento y de aquella cercanía con ella.

—Esta noche es mejor de lo que había pensado—dijo el recargando su cabeza en el hombro de ella, mientras bailaban abrazados en silencio.

 

When Iwas your men sonaba…

 

Hmmm, demasiado joven, 
demasiado tonto para darme cuenta que... 
Debí haberte comprado flores 
Y tomado de la mano 
Debí haberte ofrecido todas mis horas 
Cuando tuve la oportunidad de 
Llevarte a todas las fiestas 
Porque todo lo que querías hacer era bailar 
Ahora, mi chica está bailando 
Pero está bailando con otro hombre 

Así me duela 
Seré el primero en decir 
Que estaba equivocado 
Sí, sé que probablemente sea demasiado tarde 
Para intentarlo y pedir perdón por mis errores 
Pero sólo quiero que sepas que... 

Espero que él te compre flores 
Espero que te tome de la mano 
Te dedique todas sus horas 
Cuando tenga la oportunidad 
Te lleve a fiestas 
Porque recuerdo cuanto adorabas bailar 
Haga todas las cosas que debí haber hecho 
Cuando era tu hombre 
Haga todas las cosas que debí haber hecho 
Cuando era tu hombre.

 

—Esa canción es tan hermosa—dijo ella tras un largo suspiro

—Me gusta ese cantante aunque... es muy triste esa canción — ¿no crees?— pregunto el a ver la cara de ella.

 

—Es perfecta, para una despedida...—susurro tras varios minutos de silencio.

 

—No quisiera ser el en esos momentos...—el sonrió intentando romper el hielo que se había creado de la nada

 

—Podrías ser lo...—susurro ella muy bajito, pero no despego su cuerpo del de él.

 

—Sera mejor que nos vayamos —musito él.

 

Tras ese comentario su noche ya no era la misma se despidieron de los novios y partieron a casa de ella, ninguno de los dos hablaban iban sumidos por la música que resonaba en aquel coche.

—Fue un gusto hacer este trato contigo, una excelente despedida — ella le sonrió y abrió la puerta del auto.

El tomo su mano y el giro rápidamente de ella  sus miradas se encontraron pero ninguno de los dos eran capaces de decir algo.

— ¿Es una despedida?—pregunto el rompiendo el incómodo silencio.

Giselle se bajó del coche y camino a su casa, él no lo dudo bajo del coche y tomándola por su cintura como había hecho aquella vez que se conocieron la giro para mirarse cara a cara.

 

—Giselle espera... No puedes irte solo así...

—No déjalo, solo déjame  ir— ella  le suplico con gesto serio y él supo que no había nada más que hacer.

 

Soltó su mano lentamente y ella se apresuró a entrar a su casa, cerró la puerta y dejo caer su cuerpo recargándole en la puerta soltó un suspiro y supo que tenía que dejar atrás este capítulo de su vida.