¿Qué esperar cuándo se está esperando?

Recuerdos

-Entonces que dices? -hablo Everett desde su móvil.

-Un viaje a la playa? perfecto! mierda si! -contesto Tony emocionado- Los veré mañana a las 10 te parece bien?

-Me parece perfecto, nos vemos mañana.

-Oh mierda esto será divertido, ya me hacían falta unas vacaciones de...bueno, hacer nada -bufo Tony.

-Dímelo a mi -contesto rodando los ojos para luego colgar.

No es como si lo haya hablado con Stephen antes, pero seguramente diría que si.

-No -respondió secamente el peli negro al llegar a casa esa tarde.

-Pero porque? anímate será divertido y podrás distraerte del trabajo que buena falta te hace -replico Everett un tanto molesto.

-No quiero pasar mi única tarde libre en semanas con desconocidos, quiero pasarla con mi esposo, solos.

-No son desconocidos, hemos salido con ellos otras veces después de que ambos te conocieran Stephen por favor! -rogó Everett desde su sofá en la sala de estar.

-Porque haces eso? no me ruegues, no seas tramposo -replico El más alto dandole la espalda a su chico, cuando este le rogaba no podía negarse, era algo que Everett aveces usaba a su favor.

-Por favor Stephen! será bueno para nosotros, sera bueno para el bebé- Everett sonrió internamente-

-El bebe no es quien vera personas en incomodos trajes de baño, tampoco sentirán la arena entrar en sus zapatos o tendrá marcas de sol -excuso molesto.

-Por favor por mi -el cenizo ahora lo abrazaba por la espalda.

-No hagas eso.

-Por favor por mi-repitió restregando su rostro en la espalda del doctor.

-Everett...

-Por favor por...

-Bien! tu ganas! -Stephen se dio la vuelta rápidamente y encerró en sus brazos al cenizo que sonreía victorioso.

Stephen bufo, se dejaría ganar, solo por esta vez.

-ese truco sucio te lo enseñan en la agencia? -bromeó el pelinegro.

-No, este lo aprendi yo mismo, en nuestra Sexta cita, en el parque acuático -explico sonriente mientras abrazaba al contrario.

-Traicionado por el buen gusto -se lamento el otro.

Recordaba perfectamente ese día, años
atrás.

—

-Hombre hay tanto calor! -se quejo Ross, esa tarde ambos la tenían libre, Stephen era estudiante de medicina y Everett estudiante de leyes y de la academia de policía.

se habían conocido en una conferencia estudiantil, ambos al notarse no se quitaron los ojos de encima en lo que resto del mes y al final, Stephen quien había salido de una relación que no funcionó (con su compañera y colega Christine) fue quien se acerco y le pidió una cita, y otra y otra más después de esa.

-No tendrías tanto calor si dejaras de moverte -replico el otro, ambos, bajo un árbol del campus.

-Ya se!! Vamos al parque acuático! -propuso emocionado- será muy divertido!

-Porque siempre eres tan ruidoso? -se quejo el pelinegro recostándose en las piernas del otro y tapando su rostro con el libro que intentaba leer- odio los parques acuáticos, son poco higiénicos y están llenos de gente estupida.