Capítulo 22 - La falta de sobra

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Maratón 5/5

•Tú: Sí -tomé mi mochila del suelo- Hayes, tú..

Giré la cabeza para buscarlo con la mirada, y, antes de poder preguntarle si nos acompañaba, me encontré con la escena de Matt y él en la orilla del mar mojándose y salpicando agua con las puntas de los pies.

•Taylor: Yo las acompaño, yo también me quiero cambiar -insinuó- ¿y tú, Kevin? -Miró a su paloma con una sonrisa-

•Nash: Algún día, cuando duermas, esa paloma -la señaló-desaparecerá -advirtió fastidiado-

•Taylor: No lo escuches, Kevin -tapó sus oídos- lalalalalala -cantó a gritos-

•Cameron: -Suspiró- yo iré con ustedes -tomó su mochila y nos siguió-

Cameron, Michelle y yo nos dirigimos a una cabaña deshabitada para poder cambiarnos allí, una vez ya con nuestros trajes de baño salimos de la cabaña y nos fuimos nuevamente con los chicos.

El día fue fabuloso, duramos más de 5 horas dentro del agua, a acepción de Matt y Nash; Matt por estarse saliendo para comer, y Nash, bueno, él sólo se mantenía en las orillillas por, según el, "un calambre pasajero". Salimos un rato del agua para comer y finalmente planteamos una fogata y comenzamos a cantar canciones sencillas acompañadas por Matt con su guitarra, y, una vez sin ya no saber que mas cantar, comenzamos con alguna que otra canción ridícula que se nos venía a la mente.

Cuando me desperté por la mañana, el sol entraba a raudales por la ventana y se reflejaba por el cristal del suelo. Me estiré y sentí el tacto de las sábanas arrugadas contra mi piel. Me senté en la cama y parpadeé un par de veces hasta que mi vista se aclaró. Metí mis pies en mis cálidas pantuflas y caminé hasta la cocina, bajé con pesadez las escaleras como si en mis pantuflas cargara pesas, y, una vez a 3 escalones para llegar al piso de abajo, me detuve y observé a Matt y Nash.

•Matt: Buenos días -murmuró desde la barra con la boca llena de cereal-

•Nash: Traga, Matt, traga -se oyó fastidiado desde el sillón como si llevara mucho repitiéndole lo mismo-

•Tú: -Reí- Bueno días, ¿y mi mamá?

•XxX: -Me abrazó por la cintura- Fue a comprar mandado para comer -susurró en mi oído-

•Tú: -Me giré para verlo a los ojos- ¿Dónde está Michelle, Hayes?

•Hayes: ¿Qué? ¿Hoy no hay beso de bueno días? -Se quejó-

•Tú: ¿Dónde está Michelle? -insistí-

•Hayes: -Suspiró- Afuera con Cam.

•Tú: Gracias -besé su mejilla y salí al patio-

•Hayes: ¡Aquí! -Señaló sus labios-

•Tú: Si me preparas un café lo pensaré -grité desde el patio-

•Michelle: Hola, _____ -sonrió-

•Tú: Hola, Chelle -sonreí- am, Cam -lo miré y parecía deprimido- ¿te pasa algo?

•Cameron: No, no es nada importante -desvió mi mirada y se adentró a la cocina-

•Tú: Michelle -la miré buscando una explicación-

•Michelle: Yo no sé nada -se hizo la desentendida-

•Tú: -Suspiré pesadamente para luego adentrarme a la cocina- *¿Qué? ¿Hoy todos amanecieron de mal humor?* -todos me miraron con frialdad- ¿Se podría saber qué rayos pasa? -Exclamé llevándome las manos a la cintura-

•Matt: Na... nada -tartamudeó-

•Tú: Hayes -lo miré- amor...

La verdad, yo nunca, durante toda mi relación con Hayes, jamás lo llamé amor, supongo que más bien estaba tratando de seducirlo. Él amaba que le dijera cumplidos, y más aún, que le llamara amor.

•Hayes: _____, la seducción no es buena -se quejó-

•Tú: ¿Qué pasa, lindo? -Acaricié su mejilla-

•Hayes: Na... nada -tartamudeó inseguro-

•Nash: No te rindas, Hayes -gritó-

Supongo que se refería a mi pequeña imitación de seducción, yo sólo acariciaba la mejilla de Hayes y me pegaba a él, provocando que Hayes retrocediera cada vez más. Llegó el momento en el que se estampó contra la pared, era ahora cuando me diría que tramaban o en sí, que traían entre manos.

•Taylor: ¡Ignórala! -Gritó una vez cuando Hayes parecía querer decirme la verdad-

Giré enfurecidamente la cabeza para mirar a Nash y Taylor, y les dediqué una mirada con rabia.

•Tú: Hayes -llevé mis manos a sus hombros- ¿me dirás?

Y antes de que pudiese decir algo lo besé para convencer su decisión, era obvia su reacción. Había caído en mi imitación de seducción. Me despegué de él y lo miré nuevamente, él sólo apretó los labios formando un línea, apretó los ojos fuertemente como si alguien lo quisiera golpear.

•Hayes: Hay una aplicación llamada Vine donde se crean vídeos de seis segundo, así que comencé a subir algunos, y me llamaron para irme a Londres a hacer un grupo -dijo tan rápido pero igual lo entendí

•Tú: ¡¿Qué?! -pregunté exaltada-

•Hayes: Y casualmente los chicos también utilizan esa aplicación y también los llamaron -exclamó aun mas rápido-

*~*~*~*~*~*~*

Hey, hasta aquí llega el maratón, sí cumplí, no soy tan mala'xd Y bueno, espero que les haya gustado, si es así voten, y bueno, así, Bye'c:.

After the rain, always shines the sun - Hayes Grier (Adaptada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora